Mundial Sub-20: Así se usó por primera vez la tarjeta verde en un partido oficial: ¿Cómo funciona esta nueva regla de la FIFA?
El Mundial Sub-20 de la FIFA, que acaba de comenzar en Chile, presentó una novedad que promete revolucionar la forma de impartir justicia en el fútbol: la Tarjeta Verde o sistema Football Video Support (FVS).
Esta herramienta, alternativa al VAR, permite que los entrenadores soliciten la revisión de jugadas clave, siguiendo la dinámica de deportes como el hockey o el rugby.
El estreno oficial del sistema se dio en el triunfo de Ucrania por 2-1 sobre Corea del Sur en la jornada inaugural. El entrenador de Corea apeló al FVS, sin embargo, la decisión terminó siendo desfavorable para la selección asiática.
El objetivo del Football Video Support es agilizar el juego y evitar pérdidas de tiempo, sin renunciar a la justicia deportiva que busca la tecnología. Su aplicación se limita a cuatro situaciones concretas: 1. Goles
2. Penales
3. Expulsiones directas
4. Confusión de identidad
Cada equipo puede pedirlo un máximo de dos veces por partido, y la solicitud se hace mostrando al árbitro una tarjeta verde, recurso similar al “referee review” del hockey.
La FIFA lleva tiempo probando este sistema: primero en la Copa Juvenil Blue Stars y después en el Mundial Femenino Sub-20 de Colombia 2024. Tras los resultados positivos, ahora se decidió implementarlo en Chile.
Una de las grandes ventajas del FVS es que resulta más accesible para federaciones y torneos con menor presupuesto. A diferencia del VAR tradicional, requiere menos cámaras, menos personal técnico y una logística más simple, reduciendo considerablemente los costos.
Con la llegada del FVS, el fútbol internacional convive actualmente con tres herramientas tecnológicas de asistencia arbitral:
• El VAR clásico, ya instalado en múltiples ligas y torneos.
• El VAR 3D o semiautomático, que debutó en el Mundial de Clubes.
• El nuevo Football Video Support, presentado en el Mundial Sub-20.
De esta manera, la FIFA suma una opción que podría expandirse en el futuro y cambiar la dinámica de los torneos que buscan tecnología a menor costo, sin perder rigor arbitral.