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Los azulgrana abrieron el marcador al filo del descanso con un remate de cabeza de Ivan Rakitic (41) entre los dos centrales atléticos, pero en el 61 el argentino Ángel Correa equilibró con un tiro desde la frontal.
Al cuarto de hora, Messi hacía la primera advertencia con un tiro desde la frontal del área que detuvo el portero atlético Jan Oblak (13).
Tres minutos después, llegó la única ocasión clara del Atlético en la primera parte cuando el belga Yannick Carrasco soltó un tiro desde la izquierda que despejó Ter Stegen (16).
Fue el único destello rojiblanco en la primera parte, mientras el Barcelona imponía su ley, con un Andrés Iniesta llevando la batuta del equipo azulgrana, ante un Atlético demasiado metido atrás.
El capitán azulgrana se mostró muy activo distribuyendo y también recuperando balones.
DESPERTAR COLCHONERO
A la vuelta del descanso, el Atlético de Madrid mostró otra cara y nada más reanudarse el encuentro Antoine Griezmann se sacó un disparo desde la frontal que detuvo Ter Stegen echándose abajo (46).
El Barcelona empezó a notar la mala noche de su tridente ofensivo MSN, especialmente cuando Messi tuvo que salir del terreno de juego tras llevarse la mano a la entrepierna y solicitar el cambio, aparentemente con problemas otra vez en la zona de los aductores.
Luis Suárez apenas apareció, lo mismo que Neymar que no tuvo su noche salvo algún tiro aislado.
En el Atlético, el técnico Diego Simeone dio entrada a Fernando Torres por un gris Saúl Ñíguez y a Angel Correa por Kevin Gameiro (60), en una decisión providencial para los rojiblancos.
Apenas habían pisado el césped cuando Torres envió un balón adelante a Correa que se fue en carrera, superó a su compatriota Javier Mascherano y soltó un disparo que se coló en la portería barcelonista tras dar en la cepa del palo derecho de Ter Stegen (61).
Aunque los dos equipos siguieron intentándolo, el cansancio empezó a hacer mella tras muchos minutos de desgaste y el marcador ya no se movería pese a una última oportunidad de Jordi Alba (85).
