Allan Banegas rompe el silencio sobre su pasado en Olimpia y asegura que Victoria no fue un retroceso en su carrera
Allan Banegas posando para el lente de DIEZ durante la entrevista. Foto: Edgar Witty
Hablar de Allan Banegas es referirnos a un gran futbolista que muestra entrega, sacrificio y ser un auténtico líder dentro de la cancha. Sus recientes actuaciones con el Victoria clasificando a la liguilla, lo han puesto nuevamente en el radar como uno de los mejores centrocampistas del torneo, pero en el último año no fue así.
Su pasaje en el Olimpia lo privó de aumentar sus bonos, sucedido del poco protagonismo al mando del entrenador argentino, Pedro Troglio con una tremenda plantilla después de forzar su salida de Marathón siendo capitán y titular indiscutible.
Hoy, el contención catracho de 26 años y exolímpico con Honduras en Río 2016, se reinventó y encontró su felicidad defendiendo el escudo del Victoria, un equipo que para sus críticos, fue un retroceso, pero no para el oriundo de Estero de Indio, El Progreso, quien sabía que tenía que comenzar de nuevo brillando con luz propia para tener el éxito que desea.
¿Cómo estás viviendo tu actualidad en el Victoria?
Desde que me llamaron me gustó mucho por la propuesta que me hizo el presidente. Victoria es un equipo de historia, ahora me siento bien, con las ganas de entrar a la cancha, entregar el máximo y levantar el título.
Sería difícil pensar en una figura como Allan Banegas en el Victoria después de pasar por Olimpia y Marathón ¿Qué fue lo que más te sedujo?
Tanto tiempo en Marathón, luego Olimpia y ahora venir Victoria, la gente me había que hubo un retroceso, pero yo no lo tomé así, mi mentalidad siempre es aprender y mejorar. En el momento que estaban la propuesta era salvarse del descenso y en el transcurso buscar el campeonato, gracias a Dios estamos allí y vamos a buscar esa copa.
¿Influyeron los fichajes y el cuerpo técnico?
Sí, eso me motivó sabiendo de jugadores que venían de pelear finales y otros de ser campeón; La Ceiba es bonito y la gente es cariñosa.
Esta semana te juegas la llave del repechaje ante tu exequipo ¿Cómo miras la apuesta?
Nosotros hemos estado trabajando de la mejor manera, le hemos sacado un triunfo de remontada a Olimpia, hay un buen grupo, así que podemos pelearle a Marathón y clasificar a la semifinal. Será difícil, conozco al profe ‘Manolo’, pero estamos para pelear. Lastimosamente perdimos el primero y segundo lugar, pero estamos con las mismas ganas de siempre para quedar campeón.
Allan Banegas durante el enfrentamiento entre Victoria y Platense. Foto cortesía Victoria.
¿Te ilusiona esa copa con la Jaiba Brava?
Yo me veo quedando campeón con Victoria, es lo que uno aspira como jugador y estando en esta instancia de liguilla, para quedar campeón hay que vencer a quien sea.
Por cómo juegas y tu forma de entregarte en el campo, ¿sientes que te ha faltado el premio de ser convocado a la H?
Uno trabaja para eso, pero antes de todo Victoria. Uno siempre trata de ser tomado en cuenta, primero Dios a futuro se pueda dar, uno se lo gana de acuerdo al trabajo que haces en el equipo.
Si el ánimo de crear controversia, ¿pesa más la camiseta de un equipo grande?
Con lo que se ha dado en el transcurso de la eliminatoria con la convocatoria, creo que pesa un poco, tanto como Olimpia, España, Motagua; a Marathón le llaman uno o dos, Victoria peleando los primeros lugares no toman en cuenta a nadie. Cada jugador trata de ser las cosas bien para tener esa oportunidad.
PASAJE EN OLIMPIA
¿Por qué no lograste afianzarte en Olimpia después de ser capitán en Marathón?
Tomé la decisión de irme al Olimpia porque sabemos lo que representa. Yo iba con la mentalidad de jugar, de hacer las cosas bien, pero sabemos de su plantel grande, excelentes jugadores y sabía que iba a tener que pelearla. Tuve la oportunidad y siento que la aproveché, pero es un equipo con futbolistas muy buenos y las decisiones técnicas del entrenador uno tiene que respetarlas.
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Allan Banegas en uno de sus juegos con el Olimpia en la Liga Nacional de Honduras.
Claro, te tocaba pelear con Germán Mejía, Jorge Álvarez, Carlos Pineda, Deiby Flores...
Son jugadorazos, el mismo Deiby que ahora está en el extranjero; mi mentalidad era sumar minutos a pesar que sabía que no sería titular.
¿En algún momento pensaste que fichar por Olimpia fue un error?
En la vida hay que tomar decisiones y arriesgarse. No me arrepiento de haber llegado a Olimpia, sabemos lo que representa el club. Yo quería ser campeón, se logró dos veces y ahora estoy acá.
¿Le sigues apostando a un equipo grande o el extranjero?
La mentalidad es salir al extranjero y estar en la selección; si se da volver a un equipo grande, bienvenido.
SU VIDA PERSONAL
¿Cómo fue tu niñez?
Yo no me avergüenzo y nunca olvido de dónde vengo. Cada vez que visito mi comunidad (Estero de Indio) comparto con mis amigos y familia. Mi infancia estuvo bien, vivo cerca de una cancha de fútbol y lo hacía siempre con mis amistades; e igual en la escuela tranquilo con amigos.
¿Siempre fuiste tan culto?
Siempre se recuerdan algunas travesuras entre amigos, pero siempre he sido una persona que le gusta hacer bien las cosas, alguien ordenado. Hoy más que nunca tengo a mi mujer y a mi niña, pienso en un buen futuro por ellos.
¿A qué se dedica tu familia?
Toda esa zona es productora de palma africana. Mi familia trabaja en eso, se levantan temprano cada día para buscar el pan de cada día.
¿Algún pasaje de tu carrera como profesional que haya marcado?
Son varias, en la vida uno tiene sus obstáculos y cosas que te hacen decir -ya no puedo, o no sigo-. Estando en Marathón (2014) llegó el profe ‘Manolo’ había varios entrenando con primera y llegó él a decir que no quería ver a ningún cipote, ahora lo entiendo porque estábamos peleando descenso, pero fue algo que dije -no-, tenía 20 años y no quería regresar a reservas. En ese momento no quería seguir, mis padres me aconsejaron seguir estudiando, pero siempre fui positivo. Al fin y al cabo, campeón con Marathón, capitán y ahora estamos acá.