“Endrick se queda aquí, como se queda Guler. Puede que necesiten más minutos, pero yo no tengo prejuicios con nadie. Sólo intento poner a los mejores en cada partido, tengan 18 o 40 años. Hay que ser pacientes con los jóvenes. Aportan entusiasmo pero, por el hecho de ser jóvenes, también tienen que aprender ciertas cosas”, explicó Ancelotti.