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El árbitro de la final de la Champions en Milán admite su error: ''El gol del Real Madrid fue en fuera de juego''

Clattenburg reconoció que durante el descanso se dieron cuenta que el primer gol del partido tuvo que ser anulado.

2020-05-14

El árbitro inglés Mark Clattenburg fue el encargado en impartir justicia en la final de la Champions League del 2016 en la que el Real Madrid venció nuevamente al Atlético, pero esta vez desde la tanda de penales y en Milán.

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En una entrevista para el Daily Mail, el colegiado de 45 años reconoce que cometieron fallos claves, como el primer tanto del partido, a favor de los blancos, que no debió contar porque era un fuera de juego.

''En esa final, el Real Madrid se puso 1-0 en la primera parte, pero el gol fue en fuera de juego por muy poco. Nos dimos cuenta en el descanso. Era una acción difícil y mi asistente falló'', reconoció el silbante.

Foto: Diez

De este error sacó provecho y le sirvió para tranquilizar a Pepe cuando le señaló una falta dentro del área contra el exdelantero Fernando Torres.

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''Pepe hizo una falta sobre Torres. Estaba furioso y me dijo en perfecto inglés: 'Eso no es penalti nunca, Mark'. Entonces yo le contesté que el primer gol del partido no debería haber subido el marcador y se calló'', cuenta Clattenburg.

''La gente pensará que es raro, porque dos errores no hacen un acierto. Los árbitros no pensamos así, pero los jugadores sí. Sabía que si le decía eso aceptaría la situación. No era nada divertido arbitrarle, tenías que estar vigilando constantemente'', añade el árbitro.

Pepe, el más problemático

Clattenburg relata que el defensor portugués fue quien le dio más problemas durante la final y recuerda el momento en el que le sacó la lengua tras chocar con Carrasco.

Pepe asegura que la ''afición del Real Madrid no es tan emotiva''.

''Cuando lo hice estaba pensado: '¿Así de flojo eres para ser tan grande?'. Pepe estaba rodando por el suelo, actuando. Lo intentó dos veces para ver si expulsaba a algún jugador del Atlético. Otro árbitro hubiera picado, pero yo había hecho los deberes. Aunque intentaba no dejarme llevar por los prejuicios, conocía bien su forma de pensar y me hizo falta para intentar llevarle. Es un jugador del que no puedes fiarte. Un partido podía estar siendo fácil y, de repente, él hacía algo'', cerró.