Hoy en día
es muy difícil imaginar a Lionel Messi con otra camiseta puesta que no sea la del Barcelona. Pero, eso, más de una vez pudo haber sucedido. Como cuando el Arsenal pujó por sus servicios cuando este era un jovencito.
¿Qué club más? Pues el modesto Cádiz, ahora de la tercera división de España y que, curiosamente donde juega un hondureño; Jona Mejía.
Esto sucedió a mediados del 2005. Messi contaba con 18 años y era sólo la gran promesa del Barca, pero no estaba aún a la altura de los grandes del plantel de ese entonces, como Ronaldinho, Giuly, Eto'o o Deco, pero lo más importante no era esa apreciación deportiva, sino que el club ya tenía ocupadas las 3 plazas de extracomunitarios.
Así y todo, Messi tenía un permiso especial para jugar, aunque se dudaba de la validez de ese documento.
El Cádiz, uno de los recién ascendidos a Primera, tenía una vacante e hizo un intento por Messi prometiéndole algo que en el Barcelona no tenía asegurado: jugar.
Foto: Diez
Frank Rijkaard, quien en aquel entonces era el DT de los culé decidió esperar y la jugada terminó más que bien:
para septiembre de 2005 Messi logró la ciudadanía española y asunto terminado.
Con ello, Messi fue teniendo minutos, aunque no era titular ya que en su puesto por la derecha el francés Giuly estaba más que asentado,
el argentino roto bastante e incluso anotó varios goles en la Champions de esa temporada en donde el Barça fue campeón, sin Messi en la final ya que estaba lesionado.
Más allá de todo, lo importante es que Barcelona no cedió a su gran revelación y hoy la historia es la que conocemos: Messi líder natural del equipo y el mejor futbolista de la actualidad y de la historia, para muchos. ¿Cómo hubiese sido de haber pasado al Cádiz?. muy diferente.
