Por cometer esa infracción, el delantero del Borussia fue multado por 540,000 euros.
Unas pesquisas policiales han sacado todo a luz pública, ya que a partir de un control de carretera realizado en marzo pasado y que fue noticia el 18 de diciembre, el internacional alemán nunca llegó a sacarse el permiso y ha estado sentado al volante incluso de coches deportivos de alta gama pese a carecer del citado documento.
Reus, al momento de preguntarle acerca de su licencia de conducir, se las ingeniaba para contestar; tenía varias respuestas.
Der Spiegel ha revelado las mentiras que contaba el futbolista, que, irónicamente, asimismo ha protagonizado anuncios para marcas automovilísticas como Opel:
- A su familia le explicó que se había sacado el permiso de conducir 'en Holanda, a través de un convenio de colaboración con una autoescuela' que tenía su club, entonces el Borussia Mönchengladbach.
- A sus compañeros les dijo que se había sacado el carnet 'en Dortmund'.
- A su representante Dirk Hebel le explicó lo mismo.
- Consiguió su primer coche, un Audi Q5, a través de un leasing; solo le pidieron un documento de identidad al hacerle el contrato.
- Cuando fue parado en marzo, mostró un carnet de conducir holandés falsificado; la policía no se dio cuenta de que no era auténtico hasta que hicieron una comprobación rutinaria con un banco de datos de los Países Bajos.
