El jugador español detuvo su automóvil pacientemente para firmar autógrafos a las aficionadas y una de ellas le preguntó si iba a dejar el Barcelona a lo que respondió 'no sé, no lo sé todavía'.
Tras esta respuesta una de las aficionadas comenzó a llorar desconsoladamente y las personas presentes intentaron tranquilizarla pero no podía parar de llorar.
Luego de darle dos besos, le preguntó si sabía desde cuando lo seguía y acto seguido respondió ella misma que desde que el atacante llegó al Barcelona.
Ya con la foto de su ídolo comenzó a llorar de nuevo, momento en el que Pedro la abrazó para consolarla y le dijo que no se preocupase.
Pedro Rodríguez ha realizado toda su carrera profesional en el Barcelona y, si finalmente acaba dejando la disciplina del club, se marcharía uno de los canteranos más destacados en los últimos años.