Sergio Ramos sólo puede jugar y entrenar
con botas de color negro después de poner término final a su contrato de
patrocinio con
Nike.
El defensa del Real Madrid ha sido una de los gigantes en la marca estadounidenses de ropa deportiva durante diez años, pero el acuerdo llegará oficialmente a su fin en febrero. Ramos está escuchando ofertas de otras marcas.
Hay una cláusula en el contrato con Nike que le prohíbe el uso de calzado de una compañía diferente, salvo que haga frente a una fuerte indemnización.
Foto: Diez
A pesar de ser considerado como uno de los mejores defensas centrales, el capitán del Real Madrid está luchando para atraer nuevas marcas debido a sus altas
demandas salariales, informe diario español, Marca.
Adidas, Puma, Joma, New Balance o Under Armour son algunas de las firmas que se han acercado a un jugador que busca en su compromiso un trato más cercano al recibido con Nike.
La ausencia de Ramos en una campaña que ha lanzado Nike a nivel mundial ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia del jugador, que ahora busca más relevancia y más presencia hacia el exterior que la tenida con Nike.