Yustin Arboleda estuvo cerca de jugar en la Serie A italiana y recordó la guerrilla colombiana, así es la vida del delantero que se perfila para el Honduras vs México

El delantero Yustin Arboleda es la gran novedad en la convocatoria de Reinaldo Rueda en el primer microciclo de la Selección de Honduras pensando en los duelos contra la selección mexicana por la Nations League.

Vino a Honduras para dejar su marca en 2017. Ya en su cuenta personal registra siete goles en finales y quedó a uno del récord que dejó Danilo Tosello en la Liga Nacional de Honduras y de momento no ha perdido ninguna.

El oriundo de Bagadó, Colombia, tiene 32 años y está casado con la venezolana Paula Vivas, quien es mayor tres años. La primera cita de ambos se dio en un partido de béisbol.

Posee una finca en Venezuela, es amante de los asados, disfruta cada momento en familia e incluso llegó a confesar que “mi esposa dice que soy la mujer de la casa, ja, ja, ja. Desde pequeño me caracterizó eso de ser organizado con mi ropa, mis cosas y mi casa vive aseada. Yo limpio la casa, barro, organizo la cama, si tengo que lavar los baños lo hago. Yo en ese sentido no tengo complejos, ni ese lado que le llaman machista”.

Actualmente el delantero de 1.91 metros de estatura registra un total de 119 goles en Honduras, es el segundo extranjero con mayor cantidad de celebraciones y quinto en la tabla histórica.

Creció en el pequeño pueblo indígena de Bagadó del departamento de Chocó en Colombia. Su tierra es productora de futbolistas.

Quiso ser militar, lo pensó si no llegaba a triunfar en el fútbol. Su familia cuenta con varios miembros que forman parte del ejercito y la policía.

Siempre soñó con ser futbolista profesional y a los 17 años de edad se fue a hacer una prueba a la Serie A con el Chievo Verona, pero no se quedó.

Su debut profesional fue en su amado Independiente de Medellín en agosto de 2010. El DT fue Édgar Carvajal, conocido como El Panzer.

El fútbol lo llevó por el Zamora venezolano, Chorrillo panameño, Pasto colombiano, Antigua guatemalteco. En 2017 fichó por Marathón.

Con Paula llevan más de 10 años de casados, producto de su matrimonio tienen dos hijos: Paolo Isaac y Sara Paulett, quien es hondureña.

A Paula la conoció en 2012 en Venezuela, en una tienda compró un chip de celular y ella era cajera. Le solicitó su pin para intercambiar mensajes.

De su infancia en Bagadó recuerda que su pueblo fue tomado por grupos paramilitares colombianos que buscaban intimidar a las personas durante la guerrilla colombiana.

Su especialidad en la cocina es hacer un pollo guisado, le encanta comer pastas y además le gusta disfrutar de una deliciosa limonada.

Sus 119 goles están distribuidos así: Honduras Progreso (20), Motagua (17), Real España (13), UPNFM (12), Vida (12), Marathón (8), Platense (7), Juticalpa (5), Real de Minas (5), Olimpia (4), Real Sociedad (4), Victoria (4), Génesis (4), Social Sol (2) y Olancho (2).

Nunca formó parte de una selección colombiana y su ficha actualmente en el Olimpia tiene un valor de mercado de 150 mil dólares (3,787,851 de lempiras).