Sinclair, que trabajaba para la ONG contra el racismo Show Racism The Red Card (Saca tarjeta roja al racismo), fue condenado el martes a 150 horas de trabajos sociales y a una suspensión de 20 meses del carnet de conducir tras haber sido detenido al volante superando el límite de alcoholemia el pasado 12 de noviembre.
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El exfutbolista preguntó al agente de detenerle por ser negro, le acusó de racismo y le llamó 'blanco...' seguido de un insulto, antes de orinar en el coche patrulla.
Sinclair, exjugador del Mánchester City, West Ham y Blackpool, se declaró culpable de conducir en estado de embriaguez y ofensas raciales, por lo que se salvó de ser enjuiciado también por ataque contra agente de policía, lo que se hubiese podido traducir en un delito criminal.
El abogado de Sinclair destacó que su cliente se mostró arrepentido y pidió perdón por su comportamiento, admitiendo que el agente no tuvo un comportamiento racista.
Pese a ello, un portavoz de la BBC declaró este martes que Sinclair trabajaba como 'freelance' y que 'actualmente no hay planes' para que el exfutbolista vuelva a ejercer de comentarista.