Con quince minutos de retraso debido al lanzamiento de papeles que impedían ver una línea de fondo del terreno de juego, el partido, que se intuía una fiesta del fútbol desde las gradas, con varios miles de aficionados llegados desde Bilbao y que hicieron sombra por momentos a la afición local, no defraudó.
El Athletic se puso en ventaja a los veinte minutos, en jugada a balón parado. Markel Susaeta lanzó un córner desde el costado izquierdo y San José, aprovechándose de una mala salida del portero Rubén Martínez, cabeceó picado al fondo de las mallas.
Al 30 y de nuevo a balón parado, Bilbao amplió su ventaja con un remate de Óscar De Marcos que se había quedado muerto dentro del área tras un saque de esquina.
Los vascos, pese a encontrarse muy cómodo sobre el césped con Ander Herrera y Mikel Rico dirigiendo sin apuros el juego de su equipo, apenas gozó de ocasiones hasta bien entrada la segunda mitad, como un disparo de falta de Susaeta que se marchó alto.
Ander Herrera, con una falta ajustada al palo derecho de Rubén y que superó por el exterior a la barrera, al minuto 74 redondeando la goleada y llevó el júbilo a las gradas de Vallecas, que, debido a los varios miles de aficionados llegados desde Bilbao, se llenaron de bufandas franjirrojas