Bartra, que durante este domingo ya había colgado en las redes sociales un mensaje que daba a entender su deseo de seguir en el club de toda su vida, ya sabe que a partir del próximo 1 de julio su cláusula volverá a ser de 50 millones.
El jugador español ha tenido que decir no a las numerosas ofertas que le han llegado estos días, sobre todo de clubs que estaban dispuestos a pagar la cláusula de rescisión que estaba estipulada en 12 millones de euros hasta el 30 de junio.
El Tottenham, el Oporto, el Manchester City y el Bayern Múnich fueron algunos de los clubes que llamaron a la puerta de los representantes de Marc Bartra.
Bartra, que tenía dudas sobre si su progresión podía quedarse truncada en el Barcelona, con la presencia de otros centrales como Vermaelen o Mathieu, sabe que ahora lo que debe hacer es seguir luchando para convertirse en el central de futuro del Barcelona.