Internacionales
2015-12-18
El delantero argentino del
Barcelona Leo Messi expulsó la piedra que
le causó un cólico renal que le impidió a última hora jugar la semifinal del
Mundial de Clubes ante Guangzhou.
El gaucho no pudo acudir este viernes al entreno matutino del cuadro culé, se quedó en el hotel debido a que pasó de nuevo una mala noche a causa del dolor.
Los médicos del equipo no quieren lanzar las campanas al vuelo y piden prudencia, primero analizarán la evolución del cuerpo del futbolista tras dos días de intensos dolores.
También deberán comprobar que no queden rastros de arenilla en el ducto urinario, lo primordial es que descanse el máximo posible y puede tener un sueño reparador.
Este sábado valorarán si ya se encuentra bien para ejercitarse y ser parte del partido de final ante River Plate.