El meta estalló en llanto en pleno campo de juego una vez finalizó el encuentro, lo extraño fue que sus compañeros no sabían el por qué de sus lágrimas, minutos después se enteraron que un día antes su hijo había fallecido.
El meta no pudo controlar su emociones, sus compañeros corrieron a consolarle y algunos hasta lloraron junto a él debido a lo impactante que resultó ser.
Según informan medios locales, Ahmed mantuvo en secreto esta dura noticia para no distraer al resto de la plantilla y pidió a sus familiares no difundir la noticia para que su entrenador no lo excluyera del partido al día siguiente.
Escriba aquí su pie de foto
Escriba aquí su pie de foto
Escriba aquí su pie de foto