Donald Trump, presidente de Estados Unidos, fue este domingo el encargado de entregar el trofeo al Chelsea como campeón del primer y renovado Mundial de Clubes de la FIFA.
El conjunto inglés aplastó por 3-0 al Paris Saint-Germain tras una primera mitad maravillosa en la que marcó tres goles por medio de Cole Palmer (doblete) y Joao Pedro.
Acompañado por la primera dama estadounidense, Melania Trump, el mandatario presenció el partido desde el palco junto a Gianni Infantino, presidente de la FIFA y con quien tiene muy buena sintonía.
Posteriormente bajó al terreno de juego del MetLife Stadium de Nueva Jersey para entregar junto a Infantino la copa al capitán Reece James, además de las medallas a los campeones y los subcampeones.
En lugar de retirarse tras entregar el trofeo como suele ser habitual en estas ceremonias, Trump permaneció con los jugadores del Chelsea cuando levantaron el trofejo y festejó con ellos el triunfo.
En las imágenes se aprecia que Infantino intenta sacar al mandatario estadounidense durante las celebraciones, pero al final éste se queda con el equipo. Posteriormente, el dirigente de la FIFA se mete en la escena y luego quedan detrás de la histórica imagen.
El broche al primer Mundial de Clubes con 32 equipos activó también la cuenta atrás para el Mundial de selecciones, que organizarán Estados Unidos, México y Canadá y cuya final se jugará también en el MetLife Stadium.