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Muere la Reina Isabel a sus 96 años tras siete décadas como monarca y ya se habla de quién será el nuevo rey de Gran Bretaña

El Reino Unido lamenta el fallecimiento de la cabeza de la corona, que será tomada por el príncipe Carlos.

2022-09-08

La reina Isabel II, la monarca más famosa del mundo, falleció el jueves a los 96 años en su castillo escocés de Balmoral, con su familia a su lado. Su hijo mayor, el príncipe Carlos de 73 años, se convirtió automáticamente en nuevo monarca.

“La reina murió en paz en Balmoral esta tarde. El rey y la reina consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana”, informó el Palacio de Buckingham en un comunicado, conmocionando al Reino Unido y al mundo.

Quien era jefa de Estado del Reino Unido y 14 países de la Commonwealth, falleció tras siete décadas de reinado en los que capeó numerosas crisis de una monarquía que ahora abre un nuevo capítulo.

Una de las últimas fotos de la familia real junto a la Reina Isabel. Esta fue tomada el 5 de junio 2022.

- LO QUE SUCEDIÓ -

El deterioro de la salud de Isabel II se aceleró en los últimos días. El martes había recibido al primer ministro dimisionario, Boris Johnson, y a su sucesora, Liz Truss, en su castillo escocés de Balmoral, renunciando por primera vez en su largo mandato a celebrar este acto protocolario en Londres, para evitar un viaje de 800 km.

Dos días después, la casa real anunciaba que sus médicos estaban “preocupados por la salud de su majestad y recomendaron que permanezca bajo vigilancia médica” en Balmoral, a donde inmediatamente viajaron su hijos y nietos.

Esto incluyó al príncipe Enrique y su esposa Meghan, que se encontraba en Londres para un acto caritativo, pese a que viven en California desde que en 2020 abandonaron la monarquía británica asestando un duro golpe a la institución.

La reina Isabel II en su festejo de su cumpleaños 90 en 21 de abril de 2016.

El viaje a Escocia de la pareja, que no está en los mejores términos con la familia real, agravó la preocupación suscitada por un comunicado de Buckingham ya de por sí inusual.

La salud de la reina, que pese a su avanzada edad mantenía hasta entonces una muy apretada agenda, empezó a preocupar al país cuando el pasado 20 de octubre, tras cancelar un viaje oficial a Irlanda del Norte y “aceptar a regañadientes el consejo médico de guardar reposo”, pasó una noche hospitalizada para someterse a unas pruebas médicas cuya naturaleza nunca se precisó.