El hombre fue multado por ir a una velocidad de 62 kilómetros por hora, en una calle donde el máximo permitido era de 48. Sanders cumplió con pagar la infracción de 212 dólares que le habían impuesto pero canceló la totalidad de la deuda con monedas de centavos.
Cuando se acercó al lugar del pago Sanders le pidió a la cajera que lo esperara porque necesitaba ir a su camioneta. El hombre regresó con un balde negro lleno de centavos de dólar en cada mano. Ya en el mostrador, Sanders vertió el contenido y desparramó en la ventanilla los 222.60 dólares que equivalía a la multa más algunos otros costos administrativos.
Según comenta El Espectador, Sanders consideró que la infracción fue injusta y que representaba una extorsión, sin embargo, en declaraciones dadas a la cadena televisiva KXAS-TV argumentó que su protesta fue pacífica ya que no hirió ni puso en peligro la vida de nadie. Por otro lado, en los comentarios que ha recibido el video, muchas personas se muestran en desacuerdo con su reacción. En general las opiniones conducen a que en su protesta, Sanders se desquitó con personas que no tenían nada que ver con la supuesta injusta multa.
