Coronavirus

COVID-19: La viróloga que huyó de China publica un estudio que afirma que el virus fue creado en un laboratorio

Li-Meng Yan, una científica que escapó de su país hacia Estados Unidos en abril, asegura que el coronavirus pudo crearse en un lapso de seis meses.

2020-09-16

Li-Meng Yan, la viróloga china escapó de su país rumbo a Estados Unidos por ser una de las primeras científicas en estudiar y alertar sobre el brote del COVID-19, publicó un estudio en el que afirma que el virus fue creado en un laboratorio.

Salen a la luz las 'grandes mentiras' de China acerca del virus

La experta dio sus conclusiones en Zenodo, una plataforma digital de acceso libre. El artículo de 26 páginas, realizado en coautoría de otros tres médicos, se titula: ''Características inusuales del genoma del SARS-CoV-2 que sugieren una modificación de laboratorio sofisticada en lugar de la evolución natural y la delimitación de su ruta sintética probable''. El trabajo aún no ha sido revisado de forma independiente por pares.

En el estudio, Yan escribe que el SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19, podría haber sido ''creado convenientemente'' dentro de un laboratorio durante un período de solo seis meses ya que ''muestra características biológicas que son inconsistentes con un virus zoonótico natural''.

Los primeros informes sobre el origen del coronavirus, indicaron que el virus saltó de animal a humano dentro de un mercado en la ciudad de Wuhan a finales del 2019.

La mayoría de la comunidad científica internacional avala la teoría de un origen natural del virus y descarta que fue producido por seres humanos en un laboratorio.

China descubre que el virus puede estar en el aire hasta dos horas

Sin embargo, Yan explica que ''la teoría del origen natural, aunque ampliamente aceptada, carece de apoyo sustancial''.

La viróloga comenta que la gran mayoría de sus colegas rechazan la teoría de un virus creado en un laboratorio porque ''está estrictamente censurada en revistas científicas revisadas por pares''. No obstante, asegura que ''el SARS-CoV-2 muestra características biológicas que son incompatibles con un virus zoonótico de origen natural''.

Según Li-Meng Yan, la evidencia muestra que el SARS-CoV-2 es un producto de laboratorio creado utilizando los coronavirus de murciélago ZC45 o ZXC21 como base.

Ante este posible marco, la doctora postula que el SARS-CoV-2 pudo lograrse de forma sintética en aproximadamente seis meses.

China revela quién sería el verdadero responsable del COVID-19

Además agrega que una de las pruebas principales de que el virus fue fabricado es su alta eficiencia en la unión del receptor ACE2 de las células humanas, que le sirve como puerta de entrada, a través de una proteína viríca que encaja como una ''llave en una cerradura'', según la definición de los científicos del Instituto de Estudios Avanzados Westlake, en Hangzhou, y la Universidad Tsinghua, de Beijing que por primera vez estudiaron este mecanismo del virus.

Yan afirma que las publicaciones científicas existentes que apoyan la teoría del origen natural se basan en gran medida en un coronavirus de murciélago previamente descubierto llamado RaTG13, que comparte una identidad de secuencia de nucleótidos del 96% con el SARS-CoV-218.

Sin embargo, la especialista considera en su estudio que esa no es una evidencia suficiente porque ''los genomas virales pueden ser diseñados y manipulados con precisión''.

Li-Meng Yan y su equipo citan tres líneas de evidencia que respaldan su teoría:

1. ''La secuencia genómica del SARS-CoV-2 es sospechosamente similar a la de un coronavirus de murciélago descubierto por laboratorios militares en la Tercera Universidad Médica Militar (Chongqing, China) y el Instituto de Investigación de Medicina del Comando de Nanjing (Nanjing, China)''.

2. ''La unión al receptor (RBM) dentro de la proteína Spike de SARS-CoV-2, que determina la especificidad del huésped del virus, se asemeja al del SARS-CoV de la epidemia de 2003 de una manera sospechosa. La evidencia genómica sugiere que la RBM ha sido manipulada genéticamente''.

3. ''El SARS-CoV-2 contiene una escisión de furina único en su proteína Spike, que se sabe que mejora enormemente la infectividad viral y el tropismo celular'', algo que según los autores del informe no es natural.

Las supuesta manipulaciones habría hecho que el coronavirus se convierta en un patógeno altamente transmisible, de aparición oculta, letal, con secuelas poco claras y masivamente disruptivo.

Yan también destaca que los laboratorios de investigación de Hong Kong y la China continental lideraron en las últimas dos décadas las investigaciones sobre coronavirus, siendo los primeros en identificar a las civetas como hospedadores intermedios del SARS-CoV y aislar la primera cepa del virus, además de contar con la colección más grande del mundo de coronavirus.

Estos laboratorios, según la científica, contarían con la tecnología, los recursos y los conocimientos para realizar con relativa facilidad una manipulación de uno de estos virus.