Polina se nos presenta como una francotiradora soviética implacable. Ella es la cazadora, jamás la presa. Es capaz de eliminar convoyes enteros solamente con su rifle de tres líneas que, dicho sea de paso, es un arma con una cadencia bajísima, ya que requiere recargar manualmente una bala en la recámara cada vez que se dispara.
Durante la campaña, Polina se muestra como una persona de poca paciencia, pocos amigos y completamente irascible. Es un típico error cuando se quiere escribir a un personaje femenino de carácter fuerte, hacerla demasiado iracunda, habiendo muchas formas más de resaltar ese tipo de personalidad.
El equipo de escritores de Call of Duty: Vanguard está compuesto por tres personas, Stephen Rhodes, Tochi Onyebuchi y Sam Maggs, quien es una escritora reconocida por darle buenas historias a los personajes femeninos, como a la Capitana Marvel, quien es otra reconocida Mary Sue, pero del mundo de los cómics.
Polina es una tiradora experta, gracias a las enseñanzas de su padre, quien también era experto con el rifle de francotirador. Aunque ella sirvió a la causa como enfermera, tras un fatídico bombardeo nazi en Stalingrado, ella se ve obligada a tomar las armas y cargar contra el ejército, ella sola, resultando victoriosa.
Crear personajes buenos (independientemente de su sexo) requiere tomar en cuenta el factor humano: nadie es invencible ni perfecto en todo lo que hace. Y encontramos un gran ejemplo en un Call of Duty anterior, Modern Warfare de 2019, donde tenemos al personaje urzikistaní de Farah Karim.
Farah fue escrita en base a los consejos de una verdadera superviviente de la guerra de medio oriente. El personaje permaneció cautivo, como prisionera, durante toda su juventud, pero no está llena de odio, sino que busca la liberación de su pueblo mediante la toma de armas. La violencia es un medio, sí, pero no el que prefiere.
Tomar como referencia a Farah para la creación de Polina podría haber sido la decisión más acertada, pero no fue así. Podríamos haber tenido un personaje con muchas capas, una personalidad bien definida y, especialmente, con un propósito superior, pero Call of Duty: Vanguard toma el camino fácil, dando un estereotípico de héroe de acción a cada personaje protagonista.
La campaña de Vanguard no destaca en absoluto, y ninguno de sus personajes son particularmente interesantes. Y su personaje principal, Polina Petrova, se une a la larga lista de personajes femeninos planos, que parecen estar ahí para cubrir una cuota, a falta de un trasfondo interesante o un desarrollo argumental.