Death Stranding estará disponible gratis para suscriptores de PC Game Pass a partir del 23 de agosto

Death Stranding fue el primer (y, hasta el momento, único) título de la casa productora de Hideo Kojima, Kojima Productions, que se estrenó en 2019 como exclusivo temporal de PlayStation 4. El título fue aplaudido por muchos, aunque, como todo lo relacionado con Kojima, también tuvo sus detractores. La obra recibió una nominación como ‘Juego del Año’ durante The Game Awards de 2019.

Aunque el juego fue originalmente un exclusivo de PlayStation 4, en 2020, 505 Games llevó el juego a PC, donde más jugadores que no contaban con una consola PlayStation pudieron disfrutar del título. Más tarde se lanzó Death Stranding Director’s Cut para PlayStation 5, pero eso es otra historia. Lo importante en este momento, es el anuncio de su llegada a PC Game Pass.

Aquellos jugadores de Windows que cuenten con una suscripción activa de PC Game Pass, podrán descargar y jugar la versión original de Death Stranding sin costo adicional, a partir del 23 de agosto. Lo que al principio fue un rumor, fue tomando más fuerza durante toda esta semana, hasta que 505 Games y Microsoft hicieron el anuncio oficial.

¿De qué trata Death Stranding?

Creado y dirigido por Hideo Kojima, Death Stranding es un juego que crea su propio género. El jugador se pone en los zapatos de Sam Strand, interpretado por el actor Norman Reedus (The Walking Dead), que ejerce como repartidor, en un mundo postapocalíptico donde la mengua, una lluvia que envejece lo que toca, mantiene a las personas bajo tierra, por lo que el trabajo de repartidor es esencia para transportar cualquier cosa de una ciudad subterránea a otra.

En este mundo, la línea que divide al mundo de los vivos y el mundo de los muertos se encuentra borrosa, lo que provoca la aparición de las CVs, o Cosas Varadas, que son entidades malignas que se encuentran varadas en nuestro mundo. Cuando una CV atrapa a un ser vivo, produce una explosión que destruye absolutamente todo en un gran radio, dejando un gigantesco cráter en el lugar.

Sam deberá cumplir la última voluntad de su madre, la presidenta de lo que queda de Estados Unidos, y reconectar de nuevo al país, pero más importante aún, reconectar a las personas, hacerles sentir que, aunque separados, están unidos por hilos invisibles y la esperanza de un mejor futuro, todo y más en esta conmovedora historia que no tiene nada que envidiarle a ninguna producción de Hollywood.