Montes y su familia viajaban en su auto de La Ceiba a San Pedro Sula por la madrugada, cuando tuvo lugar el accidente en el cual el vehículo quedó destruido tras el aparatoso choque que estuvo a punto de costarle la vida.En aquel fatal accidente, Montes pudo salir con vida, pero lamenteblamente para él, su primera esposa y uno de sus hijos.
Este hombre dedicado a las leyes, pero también apasionado por el fútbol, pues fungía como comisario en los partidos de la Liga Nacional y era miembro activo del Tribunal Nacional de Arbitraje del Fútbol (TNAF), tuvo fortuna aquel día trágico, pero este miércoles no corrió con tanta suerte, pues fue asesinado de varias puñaladas en el ascensor de un centro comercial capitalino.
Eduardo Montes estaba a punto de ser nombrado como Comisario oficial de la FIFA, tras varios años ligado al fútbol hondureño, de acuerdo a lo informado por José Enesto Mejía, secretario de la Federación Nacional de Fútbol de Honduras.