Después de la firma del contrato y cuando se presentó en el césped, fue el acompañamiento de su hijo Shaqueel, de ocho años y también vestido con la camiseta del Fenerbahçe.
Ambos comenzaron a dar toques al balón, destacando la calidad del niño, quien lanzó diversos balones a una hinchada entregada a ambos.
Van Persie firmó un contrato por tres temporadas y un salario anual de 3,5 millones de euros, bonus aparte. Llevará en número 11 en la camiseta y ya ha comenzado a trabajar con sus nuevos compañeros.
'Merhaba Fenerbahçe, tesekkürler (Hola Fenerbahçe, gracias)' fueron sus primeras palabras en turco, prometiendo que 'aprender turco será una de mis prioridades ahora porque esto es muy importante para adaptarse', lo que provocó la mayor ovación de los hinchas.