En los estadios nunca puede faltar ese aficionado que alienta a su equipo los 90 minutos y que contagia a los otros hinchas a seguir animando a su club y en la casa del
Leicester City ese puesto lo ocupa Lee Jobber, el gran animador de los
Foxes.
En las gradas del
King Power Stadium, Jobber es el corazón del club y detrás de sus tatuajes, que podrían engañar a cualquiera y pensar mal, se esconde una noble personalidad.
'Cuando la gente me ve por primera vez, piensa que soy un hooligan, un guardia o un recolector de deudas, pero si me dan la oportunidad de platicar cinco minutos, se darán cuenta de que no soy así', comentó Jobber.
Leicester City es uno de los amores de su vida, pero su verdadera pasión es ayudar a niños que fueron expulsados de la escuela por diferentes razones y es mentor de jóvenes en un centro en Straffon Lane en Inglaterra.
Foto: Diez
El aficionado que toca el bombo tiene una marca de por vida en su piel en honor al Leicester City.
Jobber sigue al
Leicester City desde los cuatro años y se ha vuelto famoso en la ciudad desde que el club le encargó una misión especifica.
'Alguien del club me llamó por teléfono para decirme si quería tocar el tambor, les dije que lo intentaría. Cuando llegué a las gradas estaba pretrificado porque nunca había tocado un tambor en mi vida, pensé ¿qué hago?, ¿qué toco? Así que toqué algo muy básico. En cuanto di el primer golpe al tambor todos se me quedaron viendo, entonces agarré ritmo y empecé a hacer cosas que nunca pensé posibles', dijo el fiel aficionado de lo foxes.
Foto: Diez
Jobber ha sido tachado muchas veces de 'hooligan' en los estadios de Inglaterra.
Su mayor deseo es animar al Leicester en la
Champions League la próxima temporada y un icono de la afición de los
‘Foxes’ en las gradas del
Kin Power Stadium.
Leicester está cerca de cumplir una de las mayores hazañas en el fútbol mundial en los últimos tiempos y si logra el título de la
Premier League, muchos celebrarán el campeonato, pero nadie tanto como
Jobber.