Internacionales

Los cinco minutos de terror en México

Hubo gente que saltaba muros, se escondía en baños tratando de salvarse...

2011-08-21

Momentos de terror se vivieron en el Estadio Corona durante el partido entre Santos Laguna y Monarcas Morelia, debido a una balacera ocurrida en las inmediaciones del inmueble.

Corría el minuto 40 del primer tiempo del duelo entre albiverdes y purépechas, el cual había caído en un bache y se encontraba igualado 0-0, cuando se escucharon las detonaciones por el sector norte de la cancha, e inmediatamente los aficionados comenzaron a correr despavoridos, aunque la mayoría se protegió en medio de las butacas.

Varios jugadores de ambos equipos se dirigieron al túnel, localizado en el sector Sur, con impresionantes springs, incluyendo el silbante Francisco Chacón, así como Federico Vilar, quien se encontraba desde el otro extremo, en una verdadera estampida, mientras que el resto de los futbolistas, se resguardaron en las bancas.

ATAQUE DE SICARIOS

Y es que una camioneta de color blanca, llena de sicarios, disparó a una patrulla de Seguridad Pública sobre la Autopista Torreón-San Pedro, por lo que los uniformados abrieron fuego y empezó el intercambio de disparos, que duró aproximadamente cinco minutos, incluyéndose granadas de fragmentación.

Algunas detonaciones hicieron impacto en la fachada del inmueble, mientras que los más de 20 mil aficionados, estaban literalmente pecho tierra, soportando y escuchando el impresionante tiroteo y las ráfagas de balas, mientras que sicarios y policías intercambiaban disparos.

Entre los edificios dañados, además de la estructura del TSM, resultaron la tienda Innova Sport, así como las oficinas de TV Azteca, con un vidrio de doble capa, totalmente destrozado.

Todo mundo se resguardaba, manteniéndose a la expectativa de lo acontecido, ya que las detonaciones se escuchaban por todos lados, en un silencio de espectadores sepulcral, donde solo se escuchaban las ráfagas de las armas largas.

SÁLVENSE QUIÉN PUEDA

Los suitehabientes se escondieron en los baños de sus respectivos palcos, en tanto que el resto, estaba en los túneles y buscada identificar de dónde provenían los disparos de grueso calibre.

Luego de que cesaron los disparos, la gente invadió la cancha y se dirigió al túnel de acceso principal, el lugar más alejado de dónde estaba la confrontación entre sicarios y uniformados.

Los jugadores subieron a la tribuna principal, en busca de sus familias, para llevárselas al vestidor, sobresaliendo los porteros Oswaldo Sánchez y Miguel “Gordo” Becerra, quienes cargaban en brazos a sus pequeños hijos.

Hasta el momento, se reporta saldo blanco dentro del inmueble, mientras que las autoridades reportan un uniformado lesionado por arma de fuego en la mano izquierda, sin que fuera necesario su trasladado a un nosocomio de la localidad.

También se reportaron personas con crisis nerviosas, sobre todo de madres de familia, que protegían y abrazaban a sus hijos, al momento que eran tranquilizados por elementos de seguridad, así como socorristas, que les brindaban los primeros auxilios.