Internacionales
2016-03-11
Luis Suárez estaba sentado en el campo entrenamiento tocándose un golpe en el pie derecho,
el argentino Javier Mascherano al verlo quiso bromear con el y con la punta de de su zapato le apretó.
Cuando Suárez sintió le reclamó mientras Mascherano le reclamaba, se levantó y el argentino seguía sonriendo hasta que el charrúa intentó pegarle una patada.
Al final todo quedó en una broma, pero el uruguayo por un momento se enfureció.