Barcelona estuvo a media hora de hacer el ridículo en la Copa del Rey donde chocaron ante el Linares en dieciseisavos de final.
Los azulgranas comenzaron perdiendo y tuvieron que remontar en el segundo tiempo, donde Dembelé terminó siendo importante. Marcó la diferencia e hizo el tanto del empate.
Xavi Hernández analizó el compromiso en conferencia de prensa.
No ha sido fácil
Ni mucho menos. El triunfo ha sido importante. Nos ha costado mucho. Nos costó entender la superioridad y el último pase. Hemos estado mejor en la segunda parte porque ellos estaban más cansados. A todos los primeras nos cuesta.
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¿Qué cambió en la segunda parte?
Gente fresca y fe. Era una cuestión de fe. Era cuestión de calma y respirar y elegir el último pase. Podíamos estar media hora hablando de táctica.
¿Cómo valora el partido?
Estoy contento por el segundo tiempo y por poder superar esta fase de la competición.
¿Qué buscaba con los cambios?
Buscábamos superioridades. Sabíamos que iba a ser un partido complicado. Al final buscábamos más posesión de pelota y proteger las bandas. Jugar con tres atrás era un riesgo innecesario.
¿Qué lección saca de este partido?
Éramos mejores que el contrario, pero nos podía pasar o una expulsión tonta por soberbia o un exceso de relajación por sabernos mejores. No podíamos perder este partido. Al principio nos confiamos, pero luego lo arreglamos.
¿Qué les dijo en el descanso?
Les he dicho que podíamos hablar tres horas de táctica, pero era cosa de fe y de creérnoslo. En ese momento estábamos fuera de la eliminatoria. Hay fases en las que hemos jugado bien, pero era lo lógico.
¿Cómo valora el partido de Dembélé?
Le necesitábamos y ha respondido. Futbolísticamente, nada que decir. Ha podido marcar un golazo para archivar el partido. De la renovación no hay novedad.
¿Había que ganar sí o sí?
Sí, muchos esperaban goleadas, pero estos partidos cuestan ante rivales tan ordenados y físicos. Hay que pensar en el Granada.
