2012-08-19
Allan Lalín volvió a ser el centro de las críticas, en sus pies y con la cabeza, tuvo en más de una ocasión, marcarle a Shane Orio en el clásico que ganó Marathón frente al Real España.
Pero al minuto 53 sacó un conejo del sombrero, sorprendió a todos, desde el campo de La Máquina logró ganar el esférico, se quitó la marca de David Meza y luego dejó atrás a Pastor Martínez, condujo hasta llegar frente al arquero beliceño y disparó, pero no pudo vencerlo. Orio tuvo méritos.
En ese momento el marcador estaba 0-0, y como dice el dicho 'el que perdona pierde'. Tres minutos después que Lalín fallara, llegó Mitchel Brow para anotar el primero de sus tres goles de la noche.