Romero, es oriundo de Tegucigalpa, específicamente en la colonia El Pantanal. Llegó al campamento verdolaga a los 16 años y después de cinco parece que la espera ha terminado: “La verdad que me ha tocado esperar bastante, he perseverado y me tocado seguir trabajando. Ahora que tengo la oportunidad lo que me queda es hacer las cosas de la mejor manera”, contó.
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Confiesa que nunca se desanimó: “Sabía que estaba joven y lo que tenía que hacer era trabajar y esperar mi oportunidad, es lo que hice. Nunca me desesperé, siempre seguía trabajando”.
Romero ha marcado tres goles en dos jornadas, pedía al Creador que vengan más tantos y coloca su mirada en grandes objetivos: “Quiero seguir anotando goles, estos son unos de tantos primero Dios. Deseo tener mucha continuidad y mirar al extranjero o tener un llamado a la Selección”.
El delantero verde añadió sobre el tema que: “Le pedí a Dios la oportunidad de meter muchos goles en este torneo, lo estoy logrando y espero seguir así”, manifestó.
SOBRE EL TÉCNICO HÉCTOR VARGAS
El capitalino comentó de cómo lo tratan los defensas en la Liga Nacional: “Ellos tratan de intimidarme, diciéndome güirro, pero no me dejo, ni me quedo callado. Piensan que me va a dar miedo, pero más bien me dan ganas de encararlos y jugar con todo”, consideró.
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Al referirse a Héctor Vargas, sostiene que: “Es un muy buen entrenador, que le da oportunidad a los jóvenes. Nosotros debemos aprovechar esa oportunidad que nos da, es lo que estoy haciendo”, afirmó.
Del plantel verdolaga alabó que: “Todos los que estamos aquí tenemos ganas y queremos salir adelante”.
Finalizo contando que su familia capitalina, antes olimpista, está feliz. “Me han dicho que no baje los brazos. Que esto solo el inicio”.
