Esperamos que las fiestas no distraigan a los jóvenes integrantes de esta selección que carga sobre sus espaldas la gran responsabilidad de hacernos regresar a los campeonatos mundiales juveniles, de los que nos ausentamos en las últimas ediciones.
El entrenador de la selección adulta, Jorge Luis Pinto, en las 48 horas que estuvo en nuestro país dijo algo que el autor de esta nota viene señalando desde hace 35 años en el sentido que en Honduras nace la mejor materia prima futbolística de toda la Concacaf, incluso superior a la que producen México y Estados Unidos, que son las dos potencias del área.
El problema en Honduras es la parte formativa de los futuros futbolistas, quienes crecen sin entrenadores y sin las condiciones de infraestructura para desarrollar sus habilidades innatas.
A esto se agrega el hecho que la mayoría de jugadores no tiene acceso a la educación, algo muy distinto a lo que vivió Pinto en Costa Rica cuando dirigió a futbolistas en su mayoría bachilleres o universitarios.
Así vemos cómo algunos jugadores talentosos que triunfan en nuestra liga, cuando salen al extranjero, no consiguen ser contratados definitivamente porque exhiben claras fallas en la parte técnica y táctica, en muchos casos conocimientos elementales que no todos los equipos extranjeros están dispuestos a enseñarles.
Además, está el hecho que la mayoría de nuestros futbolistas no son constantes y durante los partidos tienen momentos de inspiración y momentos en los que desaparecen.
Súmele también que la mayoría crece sin recibir la alimentación adecuada debido a la pobreza extrema que existe en Honduras. Por esto, entre otras cosas, es que nuestra liga aunque sea muy competitiva no tiene un mejor nivel respecto a otras del área centroamericana.
Dentro de 11 días la selección hondureña Sub-20 iniciará en Jamaica la recta final eliminatoria para el campeonato mundial de la categoría que se disputará en 2015.
Según entendimos, Jorge Luis Pinto tendrá bajo su tutela al entrenador Jorge Jiménez y también a todos los entrenadores de las selecciones no adultas que prepara la FENAFUTH.
Dicen que por las vísperas se conoce cómo será la fiesta. Siendo un hombre muy estudioso, seguramente intentará influir en esta selección nacional Sub-20, aunque llega un poco tarde para ello.
Pinto es tan estudioso que se llevó en su maleta de mano el domingo 21, todos los partidos disputados por nuestra selección adulta en 2014; o sea, del torneo UNCAF y de los cuatro amistosos internacionales porque los tres que disputamos en Brasil 2014 los analizó antes de venir.
Esperamos que Jorge Luis Pinto haga honor a su segundo apellido, Afanador, que significa “trabajo excesivo, anhelo vehemente, persona que se emplea en las faenas con ansia y deseo hasta alcanzar la fatiga y el cansancio”.
Honduras tuvo a dos grandes entrenadores colombianos, Reinaldo Rueda y Luis Fernando Suárez, pero la personalidad de Pinto y su afán por el trabajo nos ponen frente a un técnico diferente a los anteriores, lo cual tengamos presente, no garantiza el éxito que lograron aquellos clasificándonos a dos mundiales en forma consecutiva.
El nuevo entrenador colombiano necesitará más que un proceso de tres años para obtener frutos, lo cual no me parece nada extraño considerando que en este momento no tenemos suficientes legionarios de categoría para que vengan a integrar la selección adulta.