Cuando se empató ante Nicaragua se llegó a decir que el resultado era natural porque “el nivel de nuestra Liga Nacional es muy bajo”. Las cosas que se tienen que escuchar y leer por parte de los “Coito lovers” para no culpar al entrenador del tremendo papelón y deplorable nivel mostrado en ese duelo. Una justificación absurda y carente de veracidad. Curioso como unas semanas después el Olimpia le metió seis al Managua en un duelo en el que los albos sólo usaron un extranjero. Es decir, con un cuadro casi nacional, se despacharon sin problemas al equipo nicaragüense.
Estoy a la espera de la nueva justificación por lo sucedido ante Guatemala. Me parece que no la encontrarán. Ha llegado el momento para dejar de justificar y comenzar a exigir. Si Fabián Coito sigue encontrando la comodidad de federativos que no le cuentan las costillas entonces será difícil que reaccione. Su idea de apostar más por jugadores jóvenes en el balance de su once inicial es equivocada. Claro que hay espacio para la juventud, pero estando bien rodeados por la experiencia. No se puede forzar la madurez y ese es el principal error del técnico uruguayo.
Mauricio Kawas lanza un mensaje claro a la "todavía dormida Selección de Honduras" de Fabián Coito. Ya se conoce el camino de la Bicolor en la octagonal, pero aún no se habla sobre si ya hay un plan de trabajo.https://t.co/KcliQiXAk4
— Diario Diez (@DiarioDiezHn) August 24, 2020
Pero ese error surge de la equivocación de permitirle a Coito que esté a cargo de la Selección Mayor y de la Selección Sub-23 (ahora Sub-24). Esa dualidad de funciones siempre genera problemas y sobre todo distracciones. Por ejemplo, ayer ante Guatemala decidió mandar al campo, en el once inicial, a seis jugadores de la escuadra preolímpica.
Y no me vengan con el cuento que los amistosos son para experimentar en su intención por defender a Coito. A estas alturas ya no estamos para experimentos. Lo que ayer vimos fue a un entrenador que quiere foguear de manera simultanea a dos selecciones. Esto debe parar ya. Los federativos deben reunirse con todo el cuerpo técnico y poner las cosas en su lugar. Si es necesario nombrar otro entrenador para la preolímpica entonces se debe hacer. El Profesor Fabián Coito puede supervisar, pero no deberá estar a cargo.
Ya no hay más tiempo que perder. Con Coito llevamos casi dos años y en lugar de ver un avance lo que detectamos es un retroceso. Veamos a Panamá, por ejemplo. Firmaron a su entrenador hace un par de meses y realizó una concentración de 25 días en septiembre. En octubre fueron a Costa Rica y le ganaron dos veces a los ticos. Pero más allá de los resultados es la idea bien establecida que aplican en el campo. Saben a lo que juegan. Honduras no.
? "El "Choco" Lozano no merece el odio con el que algunos aficionados lo tratan. Representa con dignidad y honestidad a nuestro país".
?El Blog de @makawas sobre las críticas al delantero del Cádiz de España. https://t.co/erx6ChDKdx— Diario Diez (@DiarioDiezHn) June 22, 2020
Algo similar ocurrió con Nicaragua que se miró mucho mejor que Honduras con un entrenador que apenas entrenó con el grupo tres semanas. Al final del día si la idea del entrenador está bien clara no se necesita tanto tiempo para comenzar a mostrar avances.
Y eso es lo que nos está haciendo falta, una idea clara de lo que quiere el entrenador para poder verse con orden en el terreno. Pero eso no va a suceder mientras Fabián Coito no resuelva su confusión. Esa confusión que no le permite entender que cuando convoca a la Selección Mayor no debe estar pensando en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, sino que debe estar pensando en el Mundial de Catar 2022.