El jugador que lloró cuando miró su convocatoria en la selección de Costa Rica
Allan Miranda recibió, a sus 28 años, su primer llamado a la selección tica para jugar eliminatorias.
Allan Miranda recibió, a sus 28 años, su primer llamado a la selección tica para jugar eliminatorias.
Los rumores indicaban que el espigado jugador de los florenses iba a ser convocado. La espera se le hizo eterna, esperaba ver su nombre en el listado y cumplir el sueño de ser convocado para un partido clasificatorio.
Al jugador le dieron la noticia que aparecía en la convocatoria de Óscar Ramírez y fue ahí cuando las lágrimas brotaron por su mejilla, por la felicidad de verse en la Tricolor para su primera experiencia en una eliminatoria, relata una entrevista que le realizó diario Extra de Costa Rica.
LA ENTREVISTA ÍNTEGRA
¿Cómo toma este llamado a la Selección dentro del marco de una eliminatoria?
Muy contento la verdad, no tengo palabras para decir la emoción que siento. Y con una gran responsabilidad, es un partido eliminatorio, la clasificación a la hexagonal, seguir el camino al mundial de Rusia. Es una experiencia nueva para mí de la que tengo que aprender mucho, y a ponerme a tono con los compañeros de la Selección, son jugadores de gran nivel, que juegan en grandes ligas de Europa.
¿Es esta su oportunidad para convencer al Machillo y continuar en el proceso?
Esa es la convicción que uno tiene como futbolista, siempre abrirse campo en la Selección y además de eso jugar un mundial sería excepcional. Para mí es un sueño jugar en la Selección y tampoco me pongo un techo, quiero seguir logrando cosas no solo con mi equipo sino con la Selección.
ELIMINATORIA RUMBO AL MUNDIAL DE RUSIA 2018
¿Qué le pidió en específico Óscar Ramírez en el microciclo pasado y que cumplió para que lo vuelva a tomar en cuenta?
El trabajo que él me pidió fue marcar bien y subir cuando pudiera. Por las condiciones que se dieron en el partido contra Venezuela traté de cumplir lo que me pidió, al igual cuando me puso de central. No sé de lo que me pidió qué fue lo que más le gustó, sé que no hice un partido perfecto pero tampoco fue malo y me vio condiciones para estar ahí. No es casualidad, he venido trabajando fuerte después de un año malo donde descendí.
¿Esperaba tener un año tan bueno después de experimentar un descenso?
Nunca lo esperé, pero uno siempre trabaja para eso, para jugar en un equipo grande, para llegar a una Selección, para salir del país y las cosas se van dando paso a paso. Le doy muchas gracias a Dios por llevarme a Heredia, donde me han tratado como familia, como si tuviera toda la vida de jugar ahí y apenas tengo 8 meses. Me siento superidentificado con el equipo.
¿Hace dos o tres años esperaba ser tomado en cuenta en la Selección para disputar la eliminatoria?
Sinceramente no tengo un recuerdo en el que me pregunté que me podían llamar a la Selección. Siempre me he puesto metas y una de esas fue jugar el Mundial de Brasil 2014, no se dio, por las razones que fueran y hoy estoy pensando en Rusia, pero hay que ir paso a paso.
¿Estuvo ansioso estos días esperando la convocatoria?
Estaba demasiado ansioso, tenía días esperando la convocatoria, se especulaba tanto de muchos jugadores. Hoy de la 1 de la tarde a las 3 se me hizo como un día completo. Derramé lágrimas cuando me dieron la noticia porque las cosas me han costado demasiado, y a seguir disfrutando de este buen momento.
¿En qué otra oportunidad lloró pero por un mal momento?
La más amarga que he tenido ha sido la experiencia con AS Puma, que descendimos, por todo lo que se dio durante ese semestre. Fue difícil, porque los hermanos Chinchilla siempre nos apoyaron y al descender todo se opaca. Y siento que les quedé debiendo mucho por todo lo que me dieron.
