El atacante Luis Díaz inició en el banquillo la visita del Liverpool al Luton Town, el domingo en Premier League, por primera vez desde el secuestro de sus padres, el pasado 28 de octubre en Colombia.
El jugador de 26 años no participó el pasado fin de semana contra el Nottingham Forest (victoria 3-0), el día después del secuestro de Luis Manuel Díaz y de su mujer Cilenis Marulanda.
Tampoco participó el miércoles en la visita al Bournemouth en Copa de la Liga (victoria 2-1).
“Todavía hay muchas emociones pero Luis decidió hace tres días que quería volver al entrenamiento”, declaró a Sky Sports su entrenador, Jurgen Klopp, el domingo antes del partido.
“Ya lo he dicho, el campo de entrenamiento, el campo de fútbol, es el lugar más seguro para los chicos. Es ahí donde pueden comportarse normalmente y olvidar al menos durante algunos minutos lo que pasa”, añadió el alemán.
Los padres de Díaz fueron secuestrados en Barrancas, su ciudad natal en el norte de Colombia, cerca de la frontera con Venezuela, por hombres armados en moto. La madre del delantero colombiano fue rescatada horas después del secuestro en la ciudad de Barrancas el pasado fin de semana, pero su padre sigue en poder de sus captores.
El gobierno colombiano aseguró el viernes que sería liberado próximamente por sus captores, miembros de la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN), con el que el gobierno mantiene diálogos de paz.
“Todas las señales que ha recibido, por lo que yo he entendido, son muy positivas”, dijo Klopp a la cadena Sky. “Las negociaciones están en curso pero son muy positivas, es por lo que (Díaz) quería formar parte del equipo y podría igualmente entrar a jugar”.