Una nueva generación de futbolistas hondureños está abriéndose paso en clubes de la MLS, y uno de los que empieza a destacar con fuerza es Diego Lagos, un extremo rápido, de buen pie y gran visión de juego, que actualmente brilla con el Inter Miami II en la MLS Next Pro.
Originario de Tegucigalpa, Diego emigró a Estados Unidos gracias a una beca estudiantil, lo que le permitió combinar su formación académica con el desarrollo de su carrera futbolística. Su primer club en suelo norteamericano fue el Miami Rush Kendall, donde anotó seis goles y dio tres asistencias bajo la dirección del exfutbolista y entrenador catracho Luis Cálix.
En la entrevista, Lagos destaca que fue él quien logró sacar lo mejor de él para encaminarlo hacia un nuevo sueño: llegar al conjunto de las garzas.
En esta conversación, Diego comparte cómo ha sido su paso por Inter Miami, lo que ha significado coincidir con el también hondureño David Ruiz, sus aspiraciones con la Selección Nacional de Honduras, y sorprende al contar cómo ha sido la experiencia de marcar a una leyenda del fútbol mundial como Sergio Busquets, en las oportunidades que ha tenido con el primer equipo.
LA ENTREVISTA:
¿Diego cómo estás viviendo este sueño de estar en el Inter Miami a tus 17 años?
Es una alegría grande porque es el sueño de muchos y las grandes estrellas que están allí es una buena oportunidad para aprender de ellos. Es una ilusión grande mejorar mientras estoy aquí.
¿Cómo llegaste a Inter Miami?
Empecé en Miami Rush Kendall, es una academia... estuve dos años allí, en mi temporada como Sub-17 tuve un entrenador hondureño que se llama Luis Cálix, él fue jugador profesional, fue una de las personas que me ayudó mucho para llegar a Inter Miami (Sub-18), pertenecí allí, pero a mitad de año me subieron al segundo equipo y es donde estoy ahora buscando una oportunidad.
¿Inter te buscó, alguien te recomendó, tocaron a tu puerta... ¿Cómo se dio?
En el club donde estaba hay muchos contactos con Inter Miami, en mi segundo año como Sub-17 me empezaron a mandar correos para ir a entrenar, estuve un año haciendo pruebas, pero me llamaron para empezar la temporada con ellos; fue el entrenador hondureño (Luis Cálix) que me ayudó mucho y me preparó para esta oportunidad. A propósito, antes de ello había tenido la opción de ir a Orlando City, pero opté por Miami.

Cuando llega ese llamado a entrenar con Inter Miami II ¿qué se te cruzó por la mente?
Yo estaba en Honduras de vacaciones, no me lo esperaba. Yo no había logrado ser titular en mi categoría, aunque jugaba mucho y entraba bien. Fue de mucha alegría para mí.
¿Y cómo llegaste a Estados Unidos, te subiste a la ‘bestia’?
Llegué con visa de estudiante y así he estado todos estos años. Este es mi último año de secundaria.
¿Y en Honduras te formaste en algún club?
Jugué en Olimpia, pero como a los 9 años, no continué jugando porque no me iba bien en las clases, así que mis padres no me dejaban. Hasta que me vine a Estados Unidos me dejaron hacerlo nuevamente.
Llévanos un poco dentro del club, ¿qué beneficios tiene un jugador de reservas?
Los entrenadores están preparados, las instalaciones... tenemos accesos a gimnasios y a todas las cosas para que estemos físicamente bien. Me ha ayudado mucho porque inclusive, hay entrenadores (fisioterapeutas) con los que haces ejercicios preventivos para evitar lesiones y mejores técnica y tácticamente. He crecido no solo como persona, también como jugador.
¿Desayunas allí?
Yo vivo con una tía, empiezo mis entrenamientos a las 9:30 am, pero debemos estar una hora antes. Nosotros desayunamos y almorzamos con el primer equipo.
¿Te has cruzado con David Ruiz, qué tanta cercanía tienes con él?
Sí, lo saludo siempre, con todo el respeto, pero casi no hablo mucho con él.
Es decir que tienes a Messi a un par de mesas, me imagino que siempre comiendo con Luis Suárez...
Sí, cuando yo llego a comer hablo con mis amigos que nunca nos imaginamos estar allí. Estaba en Honduras hace cuatro años y nunca se me pasó por la cabeza estar a la par de Messi.
En las oportunidades que has tenido de entrenar en el primer equipo de Inter Miami, ¿de qué has podido nutrirte?
Esos entrenamientos fueron de realización para mí porque me di cuenta de la velocidad en la que juega un jugador de esos niveles. Me puso a pensar en qué tenía que mejorar, las velocidades de la pelota... fue más que todo para que me cayera el 20’ todo. Hay que tratar de aprender todo y succionar toda la información posible.

¿Qué tal es entrenar con o contra Messi?
Messi estaba en el entrenamiento, pero no jugamos contra él.. yo en ese entreno estaba marcando a Busquets.
¿Qué tan complejo es marcarlo?
Bueno, para ser sincero... antes que le llegara ya había entregado la pelota, así que era casi imposible marcarlo. Antes de recibir la pelota ya sabe lo que hará.
En este caminar con Inter Miami II vas a tener la oportunidad, eventualmente de llegar al primer equipo: ¿cómo vives ese sueño?
Estoy ilusionado, sé que lo puedo lograr porque tengo fe en Dios. Ahora sigo trabajando para acercarnos a ese sueño. Otro de esos sueños es jugar para la Selección de Honduras, yo juego fútbol para jugar un Mundial con la H, me llena de ilusión que me den esa oportunidad.
¿Qué pasaría si Estados Unidos te apoya con papeles y puedas ser elegible para ellos?
La verdad que no me veo... jugaría para Honduras 100%. Estoy dispuesto a esforzarme para esperar una oportunidad.