El atacante hondureño de 20 años habló con DIEZ de lo que está viviendo en un nuevo equipo, una nueva ciudad, nueva cultura.
Pasó de una 'jaiba' a otra y reconoce que los lecheros le quedaron debiendo, pero no acudirá por el momento a tribunales.
¿Cómo han sido tus primeros días en el Tampico Madero FC?
Dándole gracias a Dios, estoy aquí y es una nueva oportunidad. Una liga muy competitiva, peleo por un puesto para ser titular.
¿Es la última oportunidad de Júnior Lacayo en el extranjero?
No, para mí este es un próximo paso. Es una oportunidad más grande y primero Dios me tenga algo mejor, pero todo va a depender de lo que haga.
La directiva, el entrenador me han tratado muy bien. Lo que sigue va a ser en base a mi esfuerzo y rendimiento en la cancha. El entrenador se ha acercado a platicar, más con los que venimos del Santos, es una nueva oportunidad.
Llegas al club, pero no como juvenil, ya es momento de que te consolides...
Sí, no he tenido una oportunidad competitiva aquí en México, pero estoy trabajando duro en eso para consolidarme y ser una figura.
¿Cuánto tiempo de contrato te resta con el Santos?
Ya solo este y el otro año, dos en total.
¿Ya entraste en ambiente en la ciudad?
Aquí es muy bonito, es el mismo clima que en La Ceiba.
¿Es la oportunidad que esperabas?
Sé que Dios me la iba a poner tarde o temprano, ya me llegó y ahora a darme a conocer.
¿Qué lugares de Tampico Madero has visitado?
Las playas, no es tanta la diferencia con La Ceiba, me estoy adaptando a la humedad y a las comidas.
Los tacos, y el chile son muy famosos, algunas cosas similares a las de allá.
¿Qué tal eres para comer chile?
Yo no soy bueno para el chile, de apoco me van dando y allí le voy agarrando sabor.
¿Con qué compañeros vives?
Con dos más, Julio Salas y Oscar Bernal, los dos son mexicanos. Se echan a reír con mi acento y las palabras, pero s van adaptando y entendiéndome, ja, ja.
Con Victoria, ¿Llegaste a un arreglo o te sigue debiendo?
La verdad ni hablar de ese tema, viví una mala experiencia. Pero eso ya es cosa del pasado, es una más en mi carrera y ahora a vivir el presente que es Tampico Madero.
¿Cuánto te quedaron debiendo?
Claro, casi cuatro meses, ellos sabrán si pagarme o no.
No, no lo he pensado. Ojalá ellos puedan tomar conciencia que fui con un propósito que no se dio, pero trabajar de gratis no fue la idea tampoco.
La gente quedó esperando más de Júnior...
Esperaban mucho de mí y yo iba con buenas expectativas, venía de una buena temporada con Santos en la Segunda Premier, pero llegué y había desorganización, todo estaba mal, todo eso influyó en el equipo.
LO DIJO:
'Después de la Sub-20 no he estado en ninguna, ya vendrán uno nuevos Preolímpicos, es una oportunidad enorme que cualquiera quisiera'.
'Estuve seis meses en Honduras y en cada partido esperaba que me llamaran a algún microciclo, pero no pasó'.