Alfredo Mejía volvió al Morazán, pero esta vez enfundado con una nueva camisa y nuevos compañeros en el Motagua de Honduras. Por destino del fútbol le tocó debutar contra el Real España, equipo donde jugó las últimas temporadas.
Las miradas estaban en él, había expectativa de cómo sería su recibimiento en el estadio donde alguna vez defendió los colores aurinegros, y si había que pensar en los peor, nada que ver, no hubo abucheos ni mal comportamiento de los aficionados del Real España.
Apenas hubo gritos en su contra de algunos aficionados, pero fue algo efímero, no pasó a más. En la cancha saludó a sus ex compañeros y todavía amigos de forma efusiva, entre risas, pero se vino el pitazo inicial y cada quién en su puesto. Al final, Real España empató 1-1 ante el Motagua.