Con un ramo de flores en mano y acompañado de su esposa, Clara Fúnez, el jugador visitó la tumba de su madre, doña Estela Discua Castellanos, quien ayer estaría cumpliendo 72 años.
Con mucha nostalgia y con los recuerdos viajando de un lado a otro, Discua también aprovechó para prometerle a su adorada progenitora, la Copa 14, que tanto añora el Azul.

Carlos Discua llegó a adornar con flores la tumba de su madre.
Hace dos años el “Chino” le entregó la medalla de campeón que logró ante Real Sociedad (la 13 del Ciclón) y ahora le prometió nuevamente un título.
“El tiempo pasa tan rápido y recuerdo como si hubiera sido ayer que vine cuando fui campeón. Esa vez se la prometí y se dio. Hoy nuevamente esa promesa se la volví a hacer y ella sabe que voy a luchar para que se pueda cumplir”, asegura.
Además, nos contó: “Aparte de ofrecerle a ella la copa, está la promesa a mi familia del sueño de volver a ser campeón con el equipo, a la afición y a los mismos jugadores motagüenses que deseamos esa añorada 14, que no será fácil porque tendremos a un rival que también luchará”.

El Chino Discua lleva tatuado el rostro de su madre en uno de sus brazos.
Este domingo el jugador comenzará a luchar por acercarse al cumplimiento de esta promesa.