Sin embargo, al igual que en la Liga Nacional, este joven torneo pecó de la habitual improvisación de calendarios que reina en nuestro fútbol y en las leyes del país las cuales se pueden torcer siempre en perjuicio de los menos influyentes.
Además de los dos grandes clubes capitalinos, están en la recta final del certamen dos equipos del departamento de Cortés, el Platense de Puerto Cortés, que venció al Motagua el miércoles santo, y el Villanueva de Villanueva, equipo que eliminó a tres elencos de primera división, Victoria de La Ceiba y a los dos grandes: Marathón y Real España, pero que fue obligado a jugar el martes pasado de local ante Olimpia, 48 horas antes so pena de quedar eliminados del torneo. Jugaron a la fuerza a estadio lleno y perdieron.
Los horarios y fechas en el fútbol hondureño son toda una incógnita y casi nunca se sabe un día antes si se va jugar un partido por la tarde o por la noche, a las 6:00, a las 6:30, 7:00 o 7:30 de la noche.
El Villanueva no tenía estadio para jugar su choque del martes, ya que nunca disputa sus encuentros como local los martes, sino que lo hace los miércoles y los sábados, sin embargo, el comité organizador desde Casa Presidencial sin tener previstos estos casos lo obligó a encarar su juego como local de semifinales el martes 31.
Como se vislumbró en los sorteos de las diferentes etapas, el Torneo de Copa se diseñó para que Motagua y Olimpia jueguen la Gran Final.
Ojalá que no pase lo mismo en el Torneo de Liga porque habría saturación de encuentros entre ambos en mayo y la idea de la Copa es descentralizar el balompié . Platense, que venció por un solo gol a Motagua, podría torcer los planes directivos.
Tegucigalpa tiene más gente con dinero que San Pedro Sula, pero la mayoría capitalina que puede llenar el Nacional no asiste por falta de dinero.
También es innecesario tocar el Himno Nacional en los juegos nacionales de liga o de copa, ya que el mismo se debe cantar en los juegos internacionales de la Selección o en grandes finales.
De cualquier manera es importante que 14 de los 18 departamentos del país hayan participado en este campeonato que le costará al pueblo hondureño más de 14 millones de lempiras extraídos de la tasa de seguridad.
El campeón recibirá un premio de medio millón de lempiras, el que quede segundo obtendrá L.300,000 y para el tercer lugar el premio será de L.200,000.
Los partidos de vuelta que decidirán a los dos finalistas se disputarán el miércoles 22 de abril y obviamente no se sabe en qué ciudades ni a qué horas aunque Motagua cree que lo hará en Tegucigalpa.
Este fin de semana se reanudó el suspendido torneo de la Liga Nacional, que se paró debido a los partidos de la Selección Nacional contra Guayana.
Lo malo es que juegos tan atractivos como el del campeón Motagua frente a Marathón en la capital y el de Real España frente a Olimpia en San Pedro Sula que son dos clásicos, se disputaron ayer domingo de Resurrección que es una fiesta además de religiosa un día en que la gente no está pensando en el fútbol y no dispone de dinero porque regresa de vacaciones.
En cambio sí fue atractivo el clásico ceibeño del sábado por disputarse en una ciudad vacacionista.