Liga Nacional

Fabio de Souza: 'Es un milagro de Dios que esté vivo, sufrí dos derrames cerebrales'

Fabio de Souza, el defensor brasileño de Olimpia pudo morir luego de sufrir una trombosis profunda. confiesa que tuvo dos derrames cerebrales.

2016-12-13

Que haya tenido a Fabio de Souza frente a frente sinceramente es un milagro de Dios. El futbolista brasileño del Olimpia le ha tocado bailar con la más fea en estos últimos meses, luego de sufrir una trombosis profunda, pero de la que ha salido bien librado. Lo mejor de todo, es que me ha confesado que en enero estará de vuelta en las canchas de fútbol.

Fabio, ¿a qué se debió que hayas optado a la ciudadanía hondureña, pensaste en la H?
Se debió a muchas cosas, en realidad no pedí para que me nacionalizaran, siempre me consideré un hondureño desde mucho antes de hacerlo, por todo lo que me ha dado el país, por la forma cómo me han tratado en Honduras.

La solicitud vino del profesor Carlos Restrepo cuando estaba aquí, en ese tiempo teníamos a varios jugadores en la selección nacional y el cupo de extranjero estaba lleno, él me preguntó si había la posibilidad de nacionalizarme para que pudiera llegar otro foráneo, yo le respondí que no había ningún problema, siempre estuvo bien de mi parte tomar esa decisión.

Después que te nacionalizaste, ¿se te ocurrió la locura que podías algún día ser convocado a la Bicolor, que se diera una sorpresa y un día ver tu nombre en la lista?
Nunca me he desesperado o he creído que algún día pude ser convocado, cuando me nacionalicé fue por un pedido del equipo. Que se hubiera dado la oportunidad, muchas veces lo pensé, a cualquier jugador le gustaría estar en una selección, pero nunca fue algo que me iba a deprimir o desesperar el estar o no, siempre me he quedado bien tranquilo de cómo se dieron las cosas.

Ganar un campeonato en el fútbol siempre es muy complicado, pero de los 10 que has logrado con el Olimpia, ¿cuál ha sido el más duro?
Todos han sido muy difíciles, tal vez el que le ganamos al Victoria, cuando le metimos 4-1 aquí en Tegucigalpa, ese ha sido la final más tranquila, por lo general todo los campeonatos son muy complicados, es difícil llegar a una final y ganar con una gran diferencia.

Pero si hay una final que recuerdo y que fue muy dura, fue la que jugamos contra el Real España (2009), parecía que ellos tenían un mejor equipo que nosotros, jugaban muy bien, tenían mucha posesión de pelota, el partido se resolvió en los últimos minutos con un gol que logré anotar de cabeza. ¡Fue muy brava!

Estos últimos cinco meses han sido muy duros para vos, tras sufrir una trombosis profunda, ¿cómo has logrado salir vivo?
Primero por gracia de Dios. Sin Él en esta vida nada es posible, sí estoy aquí y no tengo secuelas para nada, realmente es un milagro de Dios, aunque otras personas pueden decir otras cosas, pero eso ha sido lo principal.

Foto: Diez

Fabio de Souza ha tenido una amplia y amena charla con Limber Pérez, ex futbolista y ahora periodista de DIEZ.

¿Cómo comenzó esa enfermedad?
Fue un domingo por la mañana, iba a cepillarme los dientes y no logré levantarme de la cama, así comenzó todo. No me levanté en un inicio por la pereza, pensando que era un domingo y eran como las siete y minutos, me desperté antes, había puesto el despertador para las ocho de la mañana, luego veo que abrí los ojos antes de la hora programada, me quedé en la cama pensando en lo que iba a hacer y cuando me levanto para ir a cepillarme los dientes me caí, sentía un gran dolor de cabeza, perdí los movimientos porque no lograba caminar ni podía moverme.

Todo eso se dio por la mañana ¿a qué horas recibiste atención médica?
Casi a la una de la tarde, yo creí que iba a mejorar, pensé que era un simple dolor de cabeza normal, nada más, aunque no podía caminar, me quedé en la cama, incluso, dormí un rato más, creí que todo iba a pasar y me recuperaría de nuevo y todo tranquilo.

Normalmente las trombosis te dan un paro cardíaco o un derrame cerebral ¿algo de eso te dio a vos?
Sufrí dos derrame cerebrales.

Fabio de Souza, eres un inmortal, desciendes de los dioses del Olimpo.
Quisiera serlo, ja, ja, ja. Ahí es donde te digo que es un milagro de Dios que esté vivo, no le encuentro ninguna explicación, sentía mucho dolor de cabeza, no podía ver casi nada, cuando me enviaban un mensaje a mi celular, no podía leer lo que estaba escrito, todo era borroso, no podía caminar, no podía moverme, no tenía coordinación.

¿Qué más te afectó?
En un principio el equilibrio, no hablaba bien, tartamudeaba o no completaba las palabras. Cosas de esas me pasaron ese día. Te hablo del transcurso de ocho a una de la tarde, luego logré llamar a un amigo para que pasara por mí y me llevara al hospital, por suerte, con ese amigo estábamos cenando el sábado por la noche, fue una cena familiar en la casa de él. Se llama Jaime Salinas, me había dicho que el domingo iba a ir a Valle de Ángeles a comer algo y a pasear, pensé que se había ido y le llamé, él me salvó, aún estaba en su casa y llegó a darme socorro.

Al principio te remitieron por un problema estomacal.
Estomacal, no. Al principio se creyó que era una bacteria, que lo glóbulos blancos había subido, estaban muy altos, se creía que era una infección, había comido sushi un día antes, se creyó que era eso, estuve con suero, al otro día cuando ya tenía una mejora me enviaron de nuevo a casa.

Foto: Diez

Desde el 19 de agosto Fabio ha comenzado a entrenar de forma paulatina, luego hizo una pausa por viajar a Brasil.

¿Pero cuándo te dijeron había sido un trombosis profunda y que eso te estaba llevando a la tumba, qué pensaste?
Me di cuenta hasta un viernes, casi una semana después, pero el mismo domingo por la noche, cuando me quedé interno por la supuesta bacteria, mi pantorrilla me dolía mucho, no aguantaba el dolor y cada vez se ponía muy dura, en ese momento los doctores creían que era por la deshidratación y que eso iba a pasar, llegó el martes y seguí igual, miércoles y jueves, igual. Entonces yo comencé a buscar en internet los síntomas que sentía y todo eso, empecé a sospechar lo que era, llamé al hospital para hacer una cita con la neuróloga para que ella pudiera atenderme el viernes.

¿Te dijo la neuróloga que pudiste convertirte en un cadáver en el transcurso de los días en que tenías esa supuesta bacteria?
La verdad no le he preguntado, ja, ja, ja. sería un mentiroso, pero sí sé que un derrame cerebral, lo que tengo entendido, puede matar a una persona o dejarte en una cama vegetal.

¿Es verdad que lograron darte un masaje en la pierna donde te dio la trombosis?
Claro, supuestamente era una contractura muscular ja, ja, ja. Mejor me río, todo era para ver si mejoraba, la realidad todo fue un error, se pudo haber formado otro coágulo de sangre e ir a algún otro lugar.

¿Se manejó desde un principio que la trombosis que tenías en la pierna era una contractura muscular?
Sí, también lo de la bacteria que me había deshidratado y luego apareció la contractura, recibí un masaje por un tiempo de 10 minutos, el dolor era insoportable, no podía poner el pie en el suelo, no aguantaba, después me di cuenta que el masaje pudo llevarme el trombo a otros lugares.

Foto: Diez

PROCESO DE RECUPERACIÓN

¿En qué ha consistido todo ese proceso de recuperación?
En seguir el tratamiento médico, en las medicinas, en la parte física, de poder trabajar esa parte. He mantenido la dieta, no como muchas tonteras, en ese aspecto estoy bien.

Los jugadores que han sufrido una trombosis Profunda terminan retirándose ¿Qué va a pasar con vos?
Si todo sigue como está ahora, seguiré jugando, creo que tengo un ejemplo, aunque no sea igual, el de Darwin Quintero, del América de México, a los pocos meses ya estaba jugando. Para mí, no hay ningún problema en poder volver a las canchas y jugar de nuevo, en realidad la trombosis no afecta en nada a mi trabajo, cuando me dio estaba acostado en una cama, no en una cancha, no influye tanto.

¿Sabes que esta enfermad se va y en cualquier momento regresa, no te da miedo?
No, como te digo, puede regresar, pero ese día estaba acostado, no tengo temor de nada, la enfermedad no me dio en un terreno de juego.

¿Cómo estás psicológicamente?
Bastante bien. El fantasma de la enfermedad es algo que me va a acompañar, pero con las precauciones o las medidas correctas mi vida debe seguir igual, no hay muchos cambios.

Recién viajaste a Brasil para tener un dictamen médico ¿Fue diferente al que te dieron aquí?
No, ha sido el mismo, son muy similares, aquí tenían planeado que regresara para el mes de diciembre, todo normal con el equipo y el mes de enero cuando termine el tratamiento poder jugar en el torneo clausura. Una vez que termina el tratamiento puedo jugar y eso es en enero, eso me dijeron aquí y cuando llegué a Brasil, el médico de allá prácticamente me dijo lo mismo.

Esos son indicios que harás una buena pretemporada y veremos a Fabio de Souza cortando el juego del equipo rival en el clausura.
Claro, ya estoy en pretemporada, he trabajado con el profesor Henry Oliva, me he mantenido entrenando para poder llegar mejor una vez que comience la pretemporada y el próximo torneo.

¿Cómo sentís la pierna, todo está normal, hay algo que te preocupa, alguna molestia?
Está como yo quiero que esté, creo que los recuerdos son los que se quedan más, pero te lo repito, no siento ninguna secuela, eso ha sido muy bueno para mí.

¿Qué puede venir para los próximos días?
Primer poder seguir en el equipo, hacer un buen campeonato, estar bien, hacer lo mejor, buscar esforzarme para poder ayudar a mis compañeros.

Foto: Diez

De Souza ha recibido el apoyo de todos sus compañeros del Olimpia.

ALGO MÁS

¿Cómo estás en la parte contractual con el Olimpia?
Recién se ha terminado ahora en diciembre, pero creo voy a seguir en el equipo. Espero que me contraten nuevamente.

¿Por qué estás tan seguro que los dirigentes del equipo te van a dar un contrato sabiendo lo que te ha pasado?
Porque estoy bien, no he quedado con ninguna secuela, clínicamente estoy bien, los médicos lo saben, los exámenes han salido en buena manera, el doctor del equipo tiene contacto directo con la especialista. Yo sería el primero en dar un paso atrás si fuera lo contrario, no seguiría en el fútbol. No me voy a engañar.

Tienes una esposa ¿no tienes miedo dejarla viuda por seguir jugando fútbol?
No, para nada, no tengo miedo, no me gusta hablar de la muerte, pero no tengo miedo.

Estabas estudiando en la Universidad, ¿por qué la has abandonado?
El tiempo no me daba, es muy complicado, por la mañana tenía que trabajar, por la tarde hacer gimnasio y por la noche era la universidad, me sentía muy agotado, a veces tenía tareas y era la una de la madrugada y yo despierto, luego debía de levantarme a las cinco de la mañana para ir a entrenar.