Las madres también tiene su final

Es una señora emotiva cuando le toca hablar de su hijo, lo hace con orgullo y más cuando sabe que está cerca de volver a ser campeón de Honduras. Xiomara Juárez es la madre de Jorge Claros, volante de Motagua. Nos cuenta cómo vive la previa a la gran final y al Día de la Madre.

“Estoy feliz porque recuerdo cuando inició la pretemporada y le dije que se preparara para conseguir otro título, él me dijo que lo iba a lograr y ahora está muy cerca. Hablo con Jorge todos los días y me dice que está confiado de que será campeón y nosotros tenemos fe que así será”, dice con mucha alegría.

El Pitbull no necesita ningún psicólogo en el equipo, pues tiene a alguien que está constantemente dándole ánimo: “Siempre lo motivo a él y le digo que todo esto se da con la confianza en Dios, le aconsejo que no pelee con el árbitro, que haga su trabajo y nada más, siempre me hace caso y eso es muy bueno”, dice con orgullo.

Y agrega: “Jorge es un hijo muy bueno, siempre está pendiente de mí y me cuida mucho, habla todos los días conmigo”, confió.

CLAROS TIENE A DOS TÉCNICOS
Pero si Jorge tiene un buen desempeño en el terreno, no solamente es gracias a su técnico Ramón Maradiaga, también a doña Xiomara que siempre habla para darle indicaciones de cómo jugar.

“Siempre lo regaño por la forma de jugar y me dice: ‘mamá, usted ya parece Primi’ y lo que pasa es que yo jugué fútbol en la escuela y nadie me lo cuenta porque lo viví, siempre le doy indicaciones, la forma de jugar y él siempre ríe. Aunque siempre debe hacerle caso a Primi y que cumpla todas las indicaciones”, expresó con jocosidad.

LA PROMESA A MAMÁ

Su compromiso no solamente es con la afición de las “águilas”, también con su familia y amigos, Claros tiene algo muy peculiar y es que cada medalla que gana, siempre se la da a su madre y ella no deja de exigir una más: “Me prometió el campeonato y le pedí la medalla de campeón, también las camisas. Aprovecho este medio para decirle a Jorgito que quiero otra medalla de estas”, nos dice mientras señala la que le obsequió en 2006.

Hoy Día de la Madre pide un regalo: “Que pueda ganar el campeonato, se lo pido a Jesucristo así como me dio a mi hijo que es lo más bello que tengo”, afirmó.

Y con ese gran ánimo, doña Xiomara alista su camisas, su corazón y sus oraciones.

MARIA LUISA LAZO, MADRE DE ROGER ROJAS

Doña María Luisa sonríe cuando le toca hablar de su pequeño Roger. Es el segundo de sus tres hijos. Se llena de nostalgia ahora que lo ve grandecito, aunque para ella siempre seguirá siendo su bebé. Dice que siempre ha sido muy cariñoso con ella. No necesariamente en el Día de la Madre.

Hoy será una fecha muy especial para doña María Luisa. Le tocará celebrar su día en algún sector del estadio Nacional. En pleno festejo a las madres, su hijo le toca jugar una gran final, la primera de dos que definirán el nuevo campeón del fútbol hondureño.

Roger Rojas estará con Olimpia enfrentando al Motagua y doña María Luisa sólo espera que su bebé y su Olimpia le den el mejor regalo de todos: un triunfo.

“Espero que Olimpia nos dé un gran regalo ganándole a Motagua y ojalá que Roger juegue unos minutitos, espero que el profesor lo incluya”, dice la madre del delantero merengue.

Y agrega: “Me tocará vivir el Día de la Madre en el estadio, pero es especial porque estaré apoyando a mi hijo”.

MUY ESPECIAL
Doña María Luisa también relata lo extraordinario que ha sido Roger con ella en días como hoy. “Roger es muy especial en el día de las madres, no haya qué hacer conmigo, creo que de mis tres hijos es el más detallista”.

La madre del goleador olimpista nos confesó cómo celebró esta fecha con dos de sus hijos, Roger y Luis, el menor. “El otro día fuimos al entrenamiento del equipo donde juega mi hijo menor y Roger les obsequió un uniforme a los chiquitenes. También celebramos el Día de la Madre junto a otras madres de los compañeritos de Luis”, contó.

Sobre los regalos que Roger le ha hecho, doña Luisa recuerda que “me ha regalado ropa la mayoría de las veces, ahorita me tiene un regalito especial, pero no me dice qué es. Dice que me lo dará después del partido ante Motagua”.

Aunque doña Luisa expresa que su mejor regalo sería una anotación de su pequeño. “Un gol de Roger sería mi mejor regalo para este Día de la Madre”, cuenta.

Doña María Luisa estará atenta en las gradas del Nacional. Este año no quiere ni perfumes, flores, ropa, pasteles u otra cosa... Lo único que desea es ver jugar a su hijo la gran final y por qué no, hacer un gol.