Sin poder describir lo sucedido el martes por la Concachampions y resignándose a un milagro, los jugadores del Real España han encarado estos días de trabajo con la única obligación de romper la mala racha en casa.
El arquero Marcelo Macías dio la cara tras la derrota ante Metapán por la Concachampions y no se explicó lo que pasó con el funcionamiento del club.
“Esa derrota nos duele mucho porque hemos hipotecado el pase a la otra fase, pero yo no me siento derrotado y no he bajado los brazos”, declara el experimentado guardameta.
Macías sabe que tienen todo cuesta arriba para continuar en este torneo internacional, sin embargo, “tenemos que hacer lo imposible para clasificar, es muy difícil, lo sé, pero mientras haya posibilidades, buscaremos todos los puntos. Tengo fe y esperanza de conseguir resultados importantes, ¿y quién sabe? Dios nos da una mano y podemos clasificar”, dijo.
El meta uruguayo dice que el objetivo es llegar muy largo en este torneo, pero que si no se logra tampoco es una sorpresa.
“Hay que ser realistas, este es un campeonato hecho para los americanos y mexicanos, punto, se acabó. Desde que estoy acá ningún equipo que sea de este país ha podido clasificar a la final”, explicó.
Al consultarle si al Real España le está quedando grande este torneo internacional por los resultados obtenidos, Macías sólo se preguntó: “No podemos hablar de que nos está quedando grande, ¿por qué siempre en Honduras se desvaloriza los clubes hondureños?”.
Las mejores rachas del Real España han sido en su casa eterna, el estadio Morazán, pero hoy pasan un momento difícil en esta cancha, pues suman un total de 10 partidos sin poder saborear la victoria.
EL ESTADIO MORAZÁN YA NO ES FORTÍN
“Es algo que no me explico, antes esta cancha para nosotros era inexpugnable, nadie nos podía ganar, apenas nos sacaban un empate, hoy en día hacemos más puntos de visita que de local”, afirmó Macías un poco confundido.
Una de las razones que podría estar afectando, según Macías, es que no entrenan en este terreno: “No sé si será porque no nos permiten entrenar en la cancha en la semana, pero no quiero que esto suene como excusa”.
Además, Macías dijo que es difícil salir a la calle después de lo que ha pasado: “Es difícil poder dormir después de esto, tampoco es fácil salir a la calle”.
