Liga Nacional

Wilmer Crisanto: 'Podemos arruinarles la fiesta”

El jugador de las águilas comenta que llegan motivados para el partido de vuelta de la gran final ante Honduras Progreso.

2015-12-18

Es uno de los futbolistas que más corre en Motagua, lucha en cada jugada y deja el alma cuando disputa el balón. Ahora solo piensa en levantar la Copa 14 para los azules, su segunda personal.

Wilmer Crisanto habló con DIEZ antes de la gran final del Apertura contra el Honduras Progreso y nos cuenta cómo se motiva y qué piensa de los rivales del sábado en el Humberto Micheletti.

¿Cómo estás viviendo las horas previas para la final contra el Honduras Progreso?
Estamos bien, hemos trabajado de la mejor manera y solo nos enfocamos en lo que queremos, que es levantar la Copa 14 para Motagua.

Antes le ganabas a Rubilio Castillo en el Fifa. ¿Ahora con quién te diviertes antes de las finales jugando PlayStation?
Comparto con César Oseguera y Kevin Maradiaga, que mantienen un buen nivel, pero igual siempre están atrás de mí, son mis hijos en el Fifa.

¿Hay nervios antes de la final?
Hay muchas ganas de jugar, sobre todo porque tenemos la espinita que pudimos haber hecho más en nuestra casa, tenemos que demostrar que Motagua no solo juega bien en Tegucigalpa, que tenemos buenos futbolistas para hacerlo bien en cualquier cancha de Honduras.

¿Es bueno o malo que se diga que el Honduras Progreso es el favorito?
Ellos están pasando por un buen momento y hay que respetarlo. Recuerdo cuando estuve en Victoria y llegamos a una final, cuando uno está del otro lado se habla de todo, pero la moneda está en el aire y Motagua es un equipo grande, que sabe lo que significa una final. En este momento no hay que hablar, hay que hacerlo dentro de la cancha para ser campeón.

¿Comprendés toda esa ilusión de los jugadores del Honduras Progreso?
Yo la entiendo, porque yo pasé por un equipo denominado chico y jugar una final es lo máximo. Para algunos de ellos es su primera final y la están disfrutando y es respetable. Nosotros solo tenemos que hacer nuestro trabajo, estamos convencidos que podemos arruinarles la fiesta.

Foto: Diez



En Motagua se vive en un ambiente de concentración. ¿Es diferente lo que se experimenta en cada club?
Sí, nosotros estamos con una espinita y ahora se habla que en su cancha son más fuertes y que tienen la Copa ya ganada, pero acá no pensamos en lo que ellos pueden hacer.

¿Qué tan complicado será jugar en la cancha del Humberto Micheletti, que es más pequeña que el Nacional?
Influye mucho porque ellos la conocen bien y salen a presionar bastante, saben que es más pequeña que el Nacional. Pero nosotros sabemos cómo jugaremos allá.

¿Estás preparado para el duelo con Franklyn Morales?
Sí, estoy listo, es un jugadorazo que ha hecho un torneo envidiable, lo mismo digo de Edwin León, la gente solo habla de Ángel Tejeda, pero esos chiquitines incomodan mucho y hacen la diferencia. Cuando entra el “ñangui” es más complicado, porque abusa en la conducción y genera peligro.

Dice el “ñangui” que si anota celebrará como Mario Balotelli ¿Qué piensas?
Es mi hermanito y se le estima mucho a él y a todo el equipo porque son humildes y luchadores, están disfrutando de la final y eso es bueno porque les ha costado llegar hasta acá.

¿Y vas a caminar desde El Progreso hasta San Pedro Sula con la Copa después de correr todo el partido?
El cansancio en ese momento es lo de menos. Lo más importante saber que se hizo un gran esfuerzo durante toda una temporada, da igual si corriste seis u ocho kilómetros dentro de la cancha y luego caminas 14 kilómetros con la Copa en las manos.

¿Quién se inventó esa promesa?
Todo el grupo, estamos conscientes de que al ser campeones debemos realizar algo valioso para hacerle un tributo al sacrificio realizado.

¿Están seguros de hacer esa promesa?
Lo haremos, no lo sentiríamos tanto porque iríamos acompañado por muchas personas.

¿Será una Navidad azul?
Dios primero, por ahí dicen que Motagua en las épocas de diciembre siempre sale campeón y esperemos así sea.