Los Angeles Galaxy volvieron a una final de la MLS tras vencer al Seattle Soundes (1-0) con un agónico tanto del serbio Dejan Joveljic al 85’ que desató la euforia en el Dignity Health Sports Parkun.
El próximo 7 de diciembre, el Galaxy se enfrentará a los New York Red Bulls por el título, que derrotaron por el mismo marcador al Orlando City para pelear por el título tras 16 años de espera.
La victoria no solo fue un testimonio de la calidad colectiva del Galaxy, sino también de la resiliencia y entrega de sus figuras, especialmente de Riqui Puig, quien jugó un papel clave en el gol de la clasificación pese a haber sufrido una grave lesión durante el partido.
El mediocampista español sufrió rotura del ligamento cruzado de su rodilla izquierda en la segunda mitad, una lesión que suele obligar a los jugadores a retirarse inmediatamente del terreno de juego.
Sin embargo, Puig decidió mantenerse en el campo durante más de 30 minutos, tiempo en el que tuvo la frialdad y el talento para asistir a Joveljic en el gol decisivo.
La noticia de su lesión fue confirmada por el Galaxy, que también anunció que su joven futbolista será operado en los próximos días.
De esta manera, Riqui Puig se perderá la final contra los Red Bulls, un golpe significativo para el Galaxy, ya que el español había sido pieza clave durante los playoffs, acumulando goles y asistencias decisivas.
