El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, ha escrito desde su centro de detención una carta abierta con su puño y letra dedicada al pueblo hondureño horas antes que la Corte Suprema de Justicia ratifique su extradición a Estados Unidos.
El gobierno norteamericano acusa al exmandatario por delitos de narcotraficos y enfrenta una pena de hasta tres cadenas perpeturas en la corte sur de Nueva York.
JOH, como popularmente es conocido, ha expresado en su carta que vive un momento “muy doloroso” y que le afecta pensar que no volverá a ver nunca más a sus nietas Violeta y Olivia o que no podrá entregar en el altar a sus hijas Daniela e Isabela.
En su carta, que fue publicada por su esposa Ana García de Hernández, Juan acepta que podría enfrentar tres cadenas perpetuas y esto lo llega convertirlo en “un muerto en vida”.
El expresidente insiste que es inocente y que nunca creyó que su supuesta lucha con el narcotráfico “lo llevaría a convertirme en privado de libertad”.
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Juan Orlando Hernández también ha vuelto a asegurar que lo que vive es una venganza de narcotraficantes que fueron extraditados y otros que decidieron entregarse al gobierno de Estados Unidos.
