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Estos son los peligros de volverse adicto al WhatsApp y cómo ponerle freno

Su uso irracional puede convertirla, por ejemplo, en una herramienta de control de personas como la pareja o amigos.

2014-11-13

El uso indebido del servicio de mensajes WhatsApp puede ser peligroso porque crea adicción en algunas personas y deja huellas difíciles de controlar y borrar.

Este tipo de conducta, llevada a los extremos, p uede provocar problemas de aprendizaje, reducción de la capacidad de retención y menor capacidad de dar la cara entre las personas, mencionan algunos expertos.

Sufrir ansiedad por olvidar el smartphone en casa y no estar conectado, pasar varias horas conectados a la app, evitar el contacto personal y referir siempre a esta aplicación sea cual sea el contenido de la conversación, y escuchar alertas de WhatsApp sin que se haya recibido ningún mensaje, son signos de lo que recientemente se conoce con el término 'WhatsAppitis'.

Asimismo, como se menciona en el portal ABC.es, una de las dolencias más comunes que puede provocar la adicción a las aplicaciones de mensajería, es la tendinitis, una inflamación de algún tendón provocada por el esfuerzo constante de los mismos en las manos.

Concretamente, esta se podría manifestar tras enviar reiteradamente mensajes de texto a través del teléfono debido a la tensión de los dedos pulgares.

Otro inconveniente que puede presentarse es la nomofobia, término clínico que define a una persona que siente pavor ante la idea de salir de casa sin su smartphone. Provoca aumento de estrés y desánimo en los usuarios, los cuales no pueden evitar estar constantemente conectados a Internet y a WhatsApp.

Igualmente, el doctor Juan Cuadros Moreno, médico internista del Hospital Ángeles de México, menciona que el uso excesivo de esta aplicación u otras similares, puede producir lo que se conoce como 'phubbing', que consiste en no hacer caso a las personas que te rodean y centrar toda tu atención en el teléfono móvil.

De una forma u otra, actualmente se consulta el smartphone una media de , ya150 veces cada día, según diversos estudios que los usuarios consultan su móvil, sólo por si ha pasado algo.

Sin embargo, ese algo viene de un contexto nuevo, como las aplicaciones de mensajería instantánea, en donde WhatsApp es el rey del mercado, con seiscientos millones de usuarios en todo el mundo.

CÓMO CURARSE DE LA ADICCIÓN

Poner límites horarios como si en vez de conversar por WhatsApp estuviera viendo una película de una duración determinada es el consejo que el experto da para evitar caer en las redes de la adicción.

Si ya es tarde para curar este problema, recomienda una abstinencia de entre uno y dos meses para luego volver a aprender a utilizarlo de forma racional, sin que altere al estado de ánimo y las relaciones con otras personas.

Asimismo, es importante saber si la persona que sufre esta adicción tiene otros problemas psicológicos como inestabilidad emocional, inseguridad en uno mismo, incapacidad de comunicarse personalmente o una timidez extrema, agrega el especialista.

Esta afirmación rompe un mito, continúa, ya que este tipo de adicciones, en contra de lo que a priori pueda parecer, no sólo afecta a adolescentes, también a personas maduras con algunas debilidades.

Según indica el psicólogo, el no ver la cara de la otra persona hace que los usuarios de las redes sociales y del WhatsApp se lancen a la piscina y se sumerjan en reflexiones más intensas y espontáneas, difíciles de matizar sin verle a la otra persona la cara.

Aunque debido a su reciente implantación en la sociedad aún no hay datos de esta enfermedad asociada al uso irracional del WhatsApp, el especialista detalla que entre el 80 y 90% de la población se conecta a Internet por motivos de ocio y entre el 5 y el 9% realiza un uso inadecuado de esta herramienta.

'No tenemos cifras pero probablemente el uso indebido del WhatsApp sea mayor que el de Internet', asegura el catedrático en Psicología, quien destaca la importancia de saberle dar un buen uso a esta aplicación móvil, que de forma controlada puede ser útil y beneficiosa.