La triple medallista olímpica en kayak (dos bronces y una plata), ganó su primer oro gracias a una final perfecta (105,4 puntos, cero penalizaciones), quedando delante de la británica Mallory Franklin (108,68, 2 segundos de penalización) y de la alemana Andrea Herzog (111,13, 2 segundos de penalización).
Sin embargo, su nombre ha entrado en el historial de curiosas anécdotas que surgen desde suelo asiático, ya que también consiguió el bronce en eslalon K1 y lo hizo tirando de ingenio al utilizar un preservativo para reparar su kayak que había sufrido daños en la parte delantera.
Tras colgarse la medalla, fue la propia Fox quien publicó un video en sus redes sociales en la que se ve a un técnico del equipo australiano reparando la embarcación con una mezcla de carbono y usando el profiláctico para sujetar la mezcla al kayak.
''Apuesto a que no sabían que los condones pueden usarse para reparaciones de kayak'', bromeaba la atleta antes de comenzar la competición en la que hizo historia al colgarse el primer oro en esta modalidad. ''Tienen mucha elasticidad y son muy fuertes'', aseguró.