Decía en una parte de una canción de
Heroes del Silencio que la locura nunca tuvo maestro, pues bien, después de ver lo que esta madre hizo con su hijo le decimos a Enrique Bunbury que la locura ya tiene maestra y es una de las noticias del día en las redes sociales.
Marieke Voorsluijs es una diseñadora y madre holandesa que ha decidido tejer una réplica de tamaño real de uno de sus hijos porque él ha llegado a la adolescencia y no quiere darle abrazos.
Foto: Diez
Uno de sus hijos fue el que modeló esta “piel” de algodón que Marieke planea rellenar para convertirlo en un muñeco que ella pueda abrazar cuando quiera.
Una locura al estilo Psicósis de
Alfred Hitchcok pero al estilo algodón.