La maldición de la copa 30

Pareciera que la obtención o casi obtención de la Copa número 30 por parte de los equipos más exitosos de Centroamérica representara una terrible maldición, ya que además de estancarlos en la progresión acostumbrada de la consecución de sus títulos dentro de sus respectivos campeonatos de liga, se constituye en un motivo de ansiedad y frustración para sus aficionados, así como aumenta cada vez más la presión en la obtención del título para la próxima temporada. Veamos estos datos interesantes en el seno de estos equipos, dentro de sus respectivos torneos:

En la Liga de Guatemala, el Comunicaciones, que después de ganar a través de un hexacampeonato su Copa número 30 en el Torneo Clausura 2015, lleva ya 9 torneos seguidos sin lograr campeonizar, y está muy cerca de alcanzar los 10 torneos, que es su récord más largo de sequías (Apertura 2003 a Clausura 2008). Por otro lado, el otro equipo grande de Guatemala, Municipal, que en el Torneo Apertura 2011 alcanzó su Copa número 29, tardó 9 torneos en alcanzar su Copa 30 (fue hasta en el Torneo Clausura 2017), y actualmente lleva una sequía de 4 torneos, que bien podrían ser 5, si en esta serie de la Gran Final del Torneo Apertura 2019 no derrota al Antigua FC, el actual Campeón del Futbol Guatemalteco.

Dentro de la Liga de Costa Rica, Saprissa pasó por su sequía más larga y amarga (donde Alajuela ganó 5 copas) de su historia, con 7 torneos (Invierno 2010 a Invierno 2013), tratando de obtener su preciada Copa 30.

Actualmente tiene 3 torneos estancado en la C opa 34 donde Herediano se le ha acercado ganando 2 de ellos, y logrando ya 28 Copas. Esperemos que, al Herediano, la maldición de la Copa 30 no lo atormente también.

Sin embargo, ninguno tiene una maldición tan larga, decepcionante y amarga como el Alajuelense, quien actualmente pasa por la sequía más larga de su historia (Verano 2014 a la fecha… y contando), estancado en la Copa 29 desde hace 12 torneos.

De estos 12 torneos, en cinco de ellos disputó y perdió la gran final, y en dos de ellos, la final la perdió contra el Herediano en los lanzamientos desde el punto penal, tal como acaba de suceder, donde Herediano, después de empatarle la serie a tan solo tres minutos del finalizar el tiempo regular, le arrebató la Copa 30 de sus propias manos (en su propio estadio), en la tanda de penales, dejándolo huérfano de trofeos, en el preciso año que celebra su centenario de fundación.

En la Liga de Honduras, el Olimpia es el único equipo de entre los equipos del Campeonato Hondureño que alcanzó las 30 copas, y que al igual al resto de los equipos mencionados del área, también experimentó esta maldición, sin embargo, y para alivio del Olimpismo, la maldición duró apenas 6 torneos (Apertura 2016 a Clausura 2019), que aunque lo marcan como la sequía más larga de su historia, es mucho más corta que las presentadas por el resto de los equipos del área centroamericana, y lo confirman como el Equipo más Estable de Centroamérica.

En estos momentos, con la Copa 31 en sus vitrinas, el Viejo León respira tranquilo en la cima, observando todo el escenario a su alrededor, y donde recuerda que en el año de su centenario no se fue con las manos vacías, sino que le regaló un Tetracampeonato a su afición, donde recuerda que fue el Primer Campeón de la Concacaf que fue el Primer Equipo Centroamericano en Clasificar al Mundial de Clubes, que fue el Primer Campeón de la Concacaf League.

Pero sobre todo recuerda, que siempre será el primero en el corazón de su enorme afición. Aquella que no sólo es la más numerosa de Centroamérica, sino la más fiel y fervorosa. Aquella a quien quiere decirle: “Feliz Blanca Navidad”.