Sí, es cierto. El conjunto mexicano logró este miércoles colarse a la siguiente ronda, pero tuvo que sufrir para eliminar a un conjunto salvadoreño que se le puso a la par con un esquema táctico defesivamente bien ordenado en los juegos de ida y vuelta.
El cerrojo del equipo centroamericano les duró 85´ hasta que finalmente les bastó un penal para romper la igualdad. Fue la única forma en que pudieron vencer a Rafael García, en un segundo intento.
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En lo que respecta al juego, la balanza se inclinó en todo momento a favor del equipo azteca en el tema de la posesión del balón en un 62% contra 38% de los salvadoreños, además en los tiros a puerta al arco (27 contra 6).
Es decir, Monterrey pasó todo el partido dominando en su totalidad, y pese a sus contantes llegadas nunca pudieron hacerse presente en el marcador.
En su momento pudieron hacerlo en el minuto 50´ en la primera falta penal que sancionó el árbitro, pero el arquero Rafael García se lució al taparle el tiro a Nicolás Sánchez.
Más tarde, Carlos Portillo se lleva la pierna de Pavón y este cae en el área. Sánchez cobró revancha y esta vez la mandó a guardar.
Así se derrumbó Alianza, un equipo que llegó al BBVA Bancomer con personalidad, pero al final no lograron la hazaña después de haber empatado en casa.