El Barcelona naufragó en Londres al perder 3-0 contra el Chelsea, que además anotó otros tres tantos que fueron anulados por distintos motivos, y se complica mucho su clasificación entre los ocho primeros de la fase liguera de la Liga de Campeones.
Los de Hansi Flick, que se marcaron un gol en propia puerta por medio de Jules Koundé y jugaron media parte con uno menos por expulsión del uruguayo Ronald Araujo, cayeron en una terrorífica noche en Stamford Bridge ante un Chelsea muy superior y en el que Estevao brilló con un tanto y una gran actuación. Liam Delap, que no marcaba desde junio, puso la puntilla con el 3-0.
Bayer Leverkusen, gracias a los goles de Alejandro Grimaldo y de Patrick Schick, conquistó el Etihad Stadium al vencer al Manchester City, en un encuentro en el que Pep Guardiola hizo rotaciones dejando al noruego Erling Haaland en el banquillo.
Guardiola, que celebró su partido número 100 con los 'Citizens' en Liga de Campeones, reservó a varias de sus estrellas como Ruben Dias, Jeremy Doku, Bernardo Silva, Gianluigi Donarumma y a Josko Gvardiol, además del noruego, que sumaba 5 tantos en los 4 duelos anteriores.
El equipo inglés cuajó una pobre actuación, en la que, a pesar de dominar la posesión durante los 90 minutos, no consiguieron amenazar la portería del neerlandés Mark Flekken.
Villarreal se ha quedado sin margen de error para buscar la clasificación a la siguiente fase de la Liga de Campeones tras caer goleado en su visita al Borussia Dortmund, en una noche aciaga para el equipo castellonense que perdió todas sus opciones entre el final del primer tiempo y el inicio del segundo.
Tras una primera parte notable del conjunto de Marcelino, en la que neutralizó por completo a su rival y dispuso de las mejores ocasiones, el tanto de Guirassy en el descuento provocó un efecto en cadena que se acentuó en los primeros compases de la reanudación, con un penalti, la expulsión de Foyth, y dos goles en contra casi consecutivos.
Juventus sumó, con un gol en el tiempo añadido del canadiense Jonathan David, su primera victoria en la Liga de Campeones con una remontada en el campo de Bodø Glimt (2-3), al que sostuvo su portero Nikita Haikin, para evitar una derrota que podría haber sido mayor.
Llegaba muy apurado el equipo de Luziano Spaletti, fuera de los puestos que dan acceso a la siguiente ronda y con sólo cuatro puntos, fruto de otros tantos empates.
Pero la Juve firmó una victoria más que convincente, en la que supo remontar un marcador adverso, en una segunda parte en la que brilló el turco Kenan Yildiz, pero que a punto estuvo de dejar escapar con un penalti absurdo en el tramo final. David, en la prolongación, evitó el susto.